Trabajadores del Hospital Posadas realizaron una asamblea masiva para exigir la reincorporación de los 122 despedidos que fueron notificados el lunes pasado y convocaron un paro general para el próximo martes. El recorte incluyó a especialistas con amplia trayectoria y empleados con más de 20 años de antigüedad. El centro de salud amaneció blindado por la policía para impedir el ingreso de los cesanteados.
Con la presencia de referentes políticos y de derechos humanos, entre ellas Hebe de Bonafini, los trabajadores realizaron una asamblea en la puerta del hospital de Morón para rechazar los despidos y pedir su reincorporación. Las cesantías se comunicaron mediante una resolución interna con el listado de los contratos que serían renovados y los que no. El martes 16 la policía impidió el ingreso de los trabajadores a sus puestos de trabajo.
“Yo soy enfermera de terapia intensiva, estoy desde el 2014 con un contrato precario con un básico de 5.800 pesos”; “Yo soy Mabel, enfermera de oncología pediátrica y trabajo en el hospital hace 16 años. El despido llegó luego de que me negué a trabajar doce horas como quería el director. Si trabajara doce horas no le podría brindar a los pacientitos todo lo que necesitan”; “Yo soy Norma Enciso, enfermera especialista en áreas críticas y trabajo hace 15 años en la institución, cuando entré por un concurso real. Tengo una hermana discapacitada a cargo. Estamos frente a una total arbitrariedad, no hay ningún tipo de telegrama sólo una resolución interna. Es muy triste, este es nuestro segundo hogar. Presté servicio con total profesionalismo y he pasado hasta 35 horas seguidas adentro del hospital cuando las épocas fueron duras. Nos pusimos en contra de trabajar doce horas seguidas porque lo consideramos esclavista y ahí nos bajaron la guillotina”, contaron a los canales de televisión algunas de las enfermeras del Posadas que fueron despedidas.
Además de exigir la reincorporación, desde la asamblea denunciaron un vaciamiento del hospital dado que por los despidos varias áreas quedarían inoperativas. "Las cesantías desmantelaron por ejemplo la atención del turno noche en las áreas críticas: neonatología, unidad coronaria y terapia intensiva, que quedaron prácticamente sin atención o en manos de personal recientemente contratado", detalló el titular del de la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (FESPROSA), Jorge Yabkowski, uno de los dirigentes gremiales que acompañó la asamblea de esta mañana.
"En el caso de que se impida el ingreso del personal despedido y que estos no puedan tomar sus tareas, todas las áreas críticas donde se salvan vidas a diario quedarán desmanteladas por la noche", insistió Yabkowski, quien ayer se reunión con representantes del ministro de Salud, Adolfo Rubinstein, junto a dirigentes de la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (CICOP) para advertir la "irresponsabilidad" cometida con las cesantías.
Los gremios denunciaron ante las autoridades nacionales la persecución gremial que encubren los despidos, ya que 17 de los 23 delegados electos de CICOP en el Posadas figuran entre los censateados, además de los 55 enfermeros que fueron dejados en la calle, tras conseguir un amparo judicial que respaldó su lucha de meses contra la extensión de la jornada laboral nocturna.
"Se la agarran con el Posadas porque ahí realmente hubo una revolución. Los despidieron no sólo diciéndoles 'hoy no pueden entrar' sino que los despidieron con la Gendarmería y la Policía Federal", había denunciado la titular de la Asociación Madres de Plaza de Mayo en la ronda de ayer, antes de dar el presente en la asamblea de esta mañana.
“Este hospital es un emblema porque fue muy atacado en la dictadura por su participación sindical activa por lo que es doblemente grave que se encuentre militarizado. La asamblea va a exigir que reincorporen a los despedidos, algunos con más de 20 años de antigüedad y a cargo de puestos de trabajo irremplazables”, sostuvo la diputada de izquierda Myriam Bregman que también acompañó el reclamo de los trabajadores. En declaraciones al canal C5N, Bregman afirmó que los despidos son un ataque “contra los trabajadores y contra la salud pública”.