En su primer día de visita oficial en Rusia, el presidente Mauricio Macri se reunió con su par Vladimir Putin en el Palacio Kremlin de Moscú, donde brindaron una conferencia de prensa conjunta para resaltar la cooperación entre ambos países. Como no podía ser de otra manera, Macri coronó la jornada con su habitual chiste futbolero y dijo que volvería a ese país para la Copa del Mundo. "Dios y Messi dirán si podemos ganar o no el Mundial", le dijo a Putin.
"La Argentina le da mucha importancia a la relación estratégica global con Rusia. Coincido en que tenemos muchísimo para crecer en lo comercial, cultural y deportivo", fue lo primero que sostuvo Macri y remarcó la "vocación de trabajar juntos" con esa nación. En la misma sintonía, Putin subrayó que "Argentina es para Rusia uno de los socios más estratégicos" en América Latina. También destacó la inmigración rusa que llegó a nuestro país y cuyos descendientes todavía habitan suelo argentino.
Además, en esos primeros momentos del encuentro -que prosiguió a puertas cerradas- el mandatario argentino agradeció la ayuda prestada por Rusia en la búsqueda del submarino ARA San Juan, desaparecido desde el 15 de noviembre último con 44 tripulantes a bordo. "Es un gesto que demuestra el profundo afecto del pueblo ruso hacia el pueblo argentino", expresó Macri, quien calificó como "muy importante" la asistencia que brindó Rusia en el hasta ahora fallido operativo de búsqueda y rescate.
De la reunión también participaron, por nuestro país, el canciller Jorge Faurie; el secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo, y el embajador en ese país, Ricardo Lagorio, según se informó oficialmente. Luego ambos mandatarios compartieron un almuerzo de trabajo en el salón de Banquetes del Kremlin, con la asistencia de las comitivas de ambos países.
En su discurso, Putin planteó que su país comparte "las prioridades de la Argentina en el G20" y confirmó su asistencia a ese foro que nuestro país preside durante 2018, a la vez que señaló que ambos países acordaron "aumentar" su cooperación en organismos internacionales puesto que "comparten una postura similar" en muchos temas.
El presidente ruso también sumó que los empresarios de su país están dispuestos a "participar en la modernización de la red ferroviaria" argentina y destacó que "la Argentina es un socio muy importante" y que "el intercambio comercial creció 3,1 por ciento durante el año pasado".
Como no podía ser de otra manera, Macri coronó la conferencia con su habitual chiste futbolero. Dijo que "Dios y Messi dirán" si Argentina puede o no ganar el Mundial, en referencia a la Copa del Mundo que se disputará en junio en Rusia. Agregó que espera visitar Rusia dos veces más, para asistir a los primeros partidos de Argentina y para la eventual final.
