El fiscal Martín Prieto, a cargo de la investigación de la muerte de Franco Catanzaro, de 7 años, sostuvo que “un informe policial y todos los testigos del accidente” coinciden en que era el niño quien estaba al volante del cuatriciclo que fue embestido por otro vehículo similar. “Por las circunstancias en las que fue hallado, la policía confirmó que el nene iba manejando un cuatriciclo en una zona de médanos”, precisó el fiscal. Agregó que tienen “el testimonio de un chico de 16 años, primo del conductor imputado” por homicidio culposo agravado, Agustín Ciari, que iba en el otro cuatriciclo. El testigo adolescente “estaba en el lugar cuando pasó todo y afirmó lo mismo”, respecto del niño al volante.
Los dichos del fiscal desmienten, en principio, las versiones que señalaron que Franco Catanzaro iba como acompañante o que estaba jugando en la arena cuando fue atropellado. “La principal hipótesis con la que trabajamos es esa, pero tenemos que esperar los resultados de todos los peritajes para estar seguros”, aclaró el fiscal subrogante de la Unidad Fiscal Descentralizada número uno del Partido de la Costa.
En cuanto a Ciari, se informó que tiene 23 años, vive en Quilmes y que nunca estuvo detenido dado que la policía y el fiscal titular, Gustavo Mascioli, ahora de vacaciones, no lo consideraron necesario. Sobre la situación de Ciari, el fiscal subrogante declaró: “Desconozco los argumentos del fiscal (Mascioli) para no detenerlo, pero fue la persona que dio las primeras directivas y quien evaluó que no había que aprehenderlo, pero aún así quedó a disposición y con la obligación de presentar información del vehículo, informes médicos y análisis de sangre”.
Esta semana se tendrá información sobre los resultados de los análisis toxícológicos y de alcohol en sangre del imputado. También se están realizando peritajes técnicos para conocer el estado de los dos vehículos y una inspección ocular en el lugar de los hechos. Por la fuerza del impacto, teniendo en cuenta el estado en que quedaron los cuatriciclos, se tratará de establecer la velocidad que desarrollaban en el momento del impacto.
Prieto adelantó que una vez que se cuente con toda esa información “hay que hacer una reconstrucción completa y una vez que se disponga de estos elementos se citará al imputado”. La muerte de Franco Catanzaro se produjo por “aplastamiento en la zona torácica, con compromiso de hígado y otras lesiones como golpes en la cabeza, pero no determinante”, según la autopsia. El intendente de Pinamar, Martín Yezza, había declarado que el niño “no iba a bordo del cuatriciclo”, pero con posterioridad hizo una aclaración en su cuenta de Twitter: “No se sabe si iba o no iba en cuatri.
Eso se va a determinar en la Justicia. Hay versiones cruzadas, porque tiene consecuencias jurídicas diferentes”.
Los accidentes con cuatriciclos en la costa –hubo cuatro en dos meses, tres de ellos fatales– son protagonizados por los dueños de los vehículos y no por personas que los alquilan. Lo dijo el secretario de Seguridad de Pinamar, Matías Yáñez, quien sostuvo que los casos “no se dan con cuatriciclos alquilados porque, de hecho, de 30 lugares para alquilar (que había en esa ciudad balnearia) quedan cinco”. Yañez agregó que “el problema está con el vehículo particular porque la gente los compra cada vez más”.
Antes del caso de Franco, se produjeron las muertes en diciembre, en Pinamar, de Mauro Hernán, de 28 años, y en enero de Agustín Rebol, de 18. El lunes de esta semana, en Cariló, un niño de 12 años volcó cuando manejaba un cuatriciclo y tuvo que ser asistido en el Hospital de Pinamar, donde recuperó el conocimiento y quedó fuera de peligro.