Vermont, uno de los estados más progresistas de los Estados Unidos se sumó a la legalización total de la marihuana, ya sea para uso medicinal o recreativo para mayores de 21 años. La novedad es que su legislatura fue la que impulsó una ley, cuando en los casos anteriores fue la población a través de referéndum.
Alaska, California, Colorado, Maine, Massachusetts, Nevada, Oregon y Washington, más el distrito de Columbia, ya habían promulgado leyes tras el voto mayoritario en consultas populares. Con matices en cada caso, se autoriza el consumo personal por fuera del uso medicinal. A partir de julio, cuando la ley entre en vigencia en Vermont, se podrá tener hasta una onza de marihuana y dos plantas. La ley se destaca porque en materia medicinal no crea un mercado estatal para la venta del cannabis, sino que el gobernador republicano Phill Scott creó una comisión que determinará las condiciones para implementar la venta bajo regulación y con impuestos.
“Personalmente, creo que lo que hacen los adultos a puertas cerradas y en propiedad privada es su elección, siempre y cuando no afecte negativamente la salud y la seguridad de los demás, especialmente los niños", declaró el gobernador tras promulgar la ley, que establece la ilegalidad del consumo en la vía pública.
Scott apuntó que hacen falta campañas para que el uso del cannabis no se traduzca en accidentes de tránsito. “Debe haber planes completos y convincentes en estas áreas antes de que comience a considerarse la idea de implementar un sistema comercial de 'impuestos y regulación' para un mercado de marihuana para adultos", señaló.
El uso medicinal está autorizado en 29 de los 50 estados. Con todo, las leyes son a nivel de cada estado. A nivel federal no hay una norma para todo el territorio y, por ende, portar marihuana de un estado a otro es un delito. La promulgación de Vermont se produce horas después que el Fiscal General Jeff Sessions anunciara una nueva ofensiva en el endurecimiento de las leyes federales contra los estados que legalizaron el cannabis.