Los empleados estatales de la provincia tendrán en el sueldo de enero un aumento del 1,1 por ciento que compensará la diferencia entre la suba que recibieron en 2017, que fue de 25 por ciento, y la inflación anual que midió el Instituto Provincial de Estadística y Censos (Ipec), que registró el 26,1 por ciento. El propio gobernador Miguel Lifschitz lo confirmó ayer, al tiempo que destacó que entre los "datos preocupantes" de la economía que el gobierno de Mauricio Macri no dio en la tecla para bajar la inflación, a pesar de que fue una de sus promesas de campaña. Hace solo unos días, el mandatario había asegurado que en Santa Fe las paritarias no tendrán ni piso ni techo, en abierta diferencia con el gobierno nacional.

El aumento del 1,1 por ciento que percibirán los estatales surge de la llamada cláusula gatillo que está incluida en las paritarias de 2017. Este incremento salarial se determina de forma automática por la diferencia entre el porcentaje otorgado y la inflación real. Ante la confirmación del pago, Marcelo Delfor, secretario adjunto de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) Santa Fe, destacó que esa herramienta "garantiza que el salario no pierda poder adquisitivo".

Por su parte el Secretario Adjunto de la Comisión Directiva Provincial de Amsafé, José Testoni expresó: "Nos ganó de mano, es lo que hay que decir. Nosotros estábamos esperando que esté el dato de inflación del período. Estaba claro, es una cláusula de actualización automática, y en esa cláusula estaba perfectamente establecida la indexación de los salarios, pero igualmente nos gustaría una reunión, porque ya tienen que empezar las reuniones. Así que sería bueno tener una reunión para discutir este tema formalmente".

"Nos gusta que las discusiones sectoriales se conversen en paritarias, aun cuando son buenas noticias y decisiones políticas tomadas por el empleador", agregó.

En ese sentido, dijo que sería bueno empezar a negociar "ya", teniendo en cuenta que en las paritarias no solo se discute salario, sino también otras cuestiones que hacen a las condiciones de trabajo de los docentes como vivienda, titularización, ascensos, formación, y actualización normativa.

Lifschitz también planteó hace unos días, a diferencia del gobierno nacional, que en Santa Fe las paritarias no tendrán ni piso, ni techo. Al respecto, Testoni resaltó que "el planteo del gobernador es en sintonía con lo que viene haciendo este gobierno en los tres mandatos".

"Se sienta a discutir, se escuchan las propuestas, pone la disponibilidad económica y obviamente hay tensiones porque cada uno representa sus intereses, pero hay racionalidad en el debate", remarcó.

"Vamos a ver cómo se maneja en este marco recesivo, de ajuste, de negación de la diversidad de pensamiento, antidemocrático y antirrepublicano porque también vulnera leyes, del gobierno de Mauricio Macri y la alianza Cambiemos. Esperemos que esos marcos macroeconómicos no definan la actuación en una provincia donde hemos tenido racionalidad en el debate", concluyó.

Por su parte, el titular de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de la Provincia de Santa Fe (Festram), Antonio Ratner, reclamó la "convocatoria urgente" de las paritarias" para que se actualicen los salarios, en orden a la inflación que, según el Indice de Precios al Consumidor (IPC), alcanzó el 26,1 por ciento.

"Con estas cifras debe activarse la cláusula gatillo, ya que se había acordado un aumento del 25 por ciento en 2017 y se debe compensar la diferencia a partir del 1º de enero", explicó Ratner, y enfatizó: "Desde Festram reiteramos el pedido urgente a paritarias".

Vale destacar que la inflación del 26,1 por ciento que midió el Instituto provincial de Estadísticas y Censos (Ipec) para Santa Fe para todo el año 2017 activa la cláusula gatillo acordada en paritarias por los trabajadores estatales.