El gobierno conservador español anunció ayer que recurrirá ante la Justicia la candidatura del independentista Carles Puigdemont para volver a presidir Cataluña, alegando que pesa sobre él una orden de detención por su papel en la fallida secesión de esta región española. Lo anunció a días de que el Parlamento catalán celebre la primera sesión de investidura, prevista para el próximo martes 30 de enero.
El gobierno prevé‚ “interponer ante el Tribunal Constitucional la impugnación de la resolución que propone a la Cámara al diputado Carles Puigdemont como candidato a la presidencia de la Generalitat”, informó en rueda de prensa la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría. El recurso podría ser presentado hoy mismo por el jefe del gobierno español, Mariano Rajoy, explicó la vicepresidenta.
Si el Constitucional acepta a trámite el recurso, “conllevaría la suspensión” inmediata de su candidatura, explicó la vicepresidenta. Antes de presentar formalmente dicho recurso, el gobierno pidió un informe a un alto órgano consultivo, el Consejo de Estado. En el documento, el Consejo de Estado validó los argumentos jurídicos pero no que la impugnación se haga de manera preventiva. No obstante, una fuente del ejecutivo español indicó que el gobierno tiene la intención de seguir adelante con el recurso, destacando que el informe “es preceptivo pero no vinculante”.
El líder separatista, en exilio voluntario en Bruselas desde finales de octubre para esquivar la investigación en su contra por rebelión y sedición, es el único candidato a presidir Cataluña.
Cesado por el gobierno de Rajoy tras la fallida declaración de independencia hecha por el parlamento catalán el 27 de octubre, Puigdemont solicitó garantías para poder regresar a la sesión de investidura.