La ansiedad la sigue como sombra a Evelina Sanzo. Lo dice ella, y no faltan motivos. Atiende el teléfono y está por salir para Buenos Aires a buscar el disco nuevo, porque lo quiere tener presente hoy, en formato físico, para quienes ya lo compraron. Es decir, Tabú -su segundo trabajo discográfico‑ significa varias cosas. Entre ellas, haber sido editado gracias al crowdfunding. Es con esa gente con quien Sanzo quiere ser especialmente atenta.
Pero la atención será todavía mayor. Todo aquel que quiera acercarse a Parque Yrigoyen (27 de febrero y Laprida) a partir de las 20, podrá asistir, con entrada libre y gratuita, a la presentación de Tabú, primero de los shows con el cual la Secretaría de Cultura y Educación de la Municipalidad abre su clásico ciclo "Rosario bajo las estrellas", que se repartirá en varias sedes de la ciudad hasta principios de marzo. También participará de la noche Silvina Santandrea con un show de humor unipersonal, y vale destacar que Economía Solidaria aportará un servicio de bufé para volver todavía más grato el momento.
"Tabú se terminó de grabar a mediados de año, pero entre otras cosas aguanté un tiempo ante la posibilidad abierta por Espacio Santafesino, porque gané la convocatoria como sello discográfico (con Neptunia Discos). Pareciera que los procesos creativos a veces van más rápido que los procesos de edición y producción; terminé la edición física, falta la parte de la presentación, pero ya empecé a hacer canciones nuevas y tengo el nombre del tercer disco", dice ininterrumpida Evelina Sanzo a Rosario/12, aun cuando no revele el nombre de ese disco pero sí sus motivaciones: "Me quiero definir más en cuanto a género musical. Voy así, ansiosa, inquieta, no puedo parar de hacer canciones".
Se decía que Tabú significa varias cuestiones, por sobre todas ellas porque se trata de "la primera experiencia produciendo sola. Fue un trabajo hermoso y no creo que deje de hacer mis discos de esa manera. Podré en algún momento trabajar con un productor o productora, pero no quisiera no estar encima de la música, soy muy quisquillosa. También estudio y aprendo mucho mientras voy haciendo los arreglos, estoy en un proceso muy lindo. Ahora tengo para grabar en casa, estoy estudiando piano. Siempre estoy estudiando alguna cosita que sé que me va a sumar a la música que estoy haciendo".
El videoclip oficial de Tabú muestra una Sanzo frontal, urgente. Los cuerpos que participan con ella -divididos y reunidos por el montaje‑ se muestran plurales, miran la cámara, bailan; ella los besa a todos. Hay un dolor y un erotismo que se fusiona con candor. "Al video también lo dirigí, estuve en todo. Es un video realmente visceral, muy sanador. Por otra parte, cuando pensé el sello Neptunia, lo hice desde una perspectiva de género, porque hay muchas mujeres con la decisión de ocupar estos lugares, como el del productor, que siempre fue del varón. Por suerte, en general se están viendo más mujeres en la música. También me gusta verlas tocar solas, y que se animen a producir sus discos. A mí me decían, '¿estás haciendo el disco sola?'. Sí, sola. Es decir, sin ningún hombre. Tuve algunos choques con algunos compañeros de trabajo porque, obviamente, la igualdad no sólo pasa por un número, por ver cuánta gente grabó, sino también por ver cómo te relacionás con los demás".
-‑No puedo dejar de subrayarlo, pero hacer un disco sola no debiera llamar la atención, hay muchos músicos varones como ejemplos.
-‑El otro día fui al Día Nacional del Músico que se hizo en Anderson, y felicité a los organizadores porque incluyeron un montón de mujeres en la grilla. La vez que canté en el Anfiteatro, en los "50 años de Rock en Castellano", éramos ocho o nueve mujeres entre 130 varones; una diferencia enorme, cuando hay muchas mujeres tocando. Me dije, ¿qué pasa acá? A mucha gente se le escapan estas cuestiones. Los varones debieran comenzar a correrse un poquito para dejar lugar a las mujeres. Porque en los lugares de toma de decisión, siempre hay varones. Insisto, no pasa por una cuestión de números. Tampoco me gusta una banda por el solo hecho de estar constituida por mujeres, no creo que pase por ahí.
-‑Así como los hombres debieran correrse un poquito, también la mujer debe pedir esos lugares.
-‑Hace poco discutí con un periodista que me propuso hacer una fecha con Euge Craviotto, de Mamita Peyote, con una entrevista en un bar. Viste que los arreglos para los músicos no son nada buenos, y me negué, no quise acceder a ese arreglo; entonces, él me dice, "ah, vos porque sos brava". Y no, no soy brava. Si cualquier hombre hace lo mismo, no llama la atención. Si una mujer se planta, resulta que es brava, que tiene carácter. Cuando en verdad me gusta reclamar y defender mis derechos.
-‑Te escucho y pienso en el video de Tabú, en lo que cantás y en cómo te mostrás. Diría que hasta es un encontronazo con la corrección política.
-‑La parte donde estoy desnuda y pintada no fue fácil de hacer, rodeada de gente que no conocía, pero lo decidí porque le quería poner el cuerpo de esa manera, no de otra, en donde se me cosificara. Creo que soñaba con esa imagen. Una chica, un chico, una chica trans, una embarazada (enumera imágenes del video), todo eso tiene que ser natural. Cuando vi todas esas imágenes reunidas, hasta me resultó erótico. El símbolo de pintarse los labios pero también de sacárselo, hubo un montón de cosas que pude elegir, decidir, y sé que también puede haber mucha gente a quien no le guste. No tengo ningún problema en asumir que podría estar en pareja con un hombre, con una mujer, es también algo totalmente natural. Por eso quería que así se viera. Hoy estaba en la isla, y a mí me gusta quedarme sin la parte de arriba, pero miraba a ver si le molestaba a alguien. Yo no quiero molestar a nadie, pero lo cierto es que también me gustaría quedarme en tetas. Hay cosas que estaría bueno que se empiecen a naturalizar, y otras a desnaturalizar, como por ejemplo los abusos en la infancia, un tema del que no se habla, o las lesbianas que tienen bebés.
El show de esta noche verá a Evelina Sanzo junto a Daniel Pellegrinet en guitarra, en la interpretación de los temas nuevos así como de otros "a los que yo les digo clásicos. Ahora vienen las presentaciones, ¡qué mambo! Es loco, ya estoy haciendo algo nuevo y todavía no hice la presentación, a lo mejor cada vez es más rápido. Que nunca me pase que no tenga nada que presentar. ¿Viste que a algunos músicos les pasa que están bloqueados? A mí, por suerte, eso no me pasa, está todo muy a flor de piel".