Mientras se aguarda con expectativa la reunión que mantendrán el próximo martes el Ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, y la intendenta Mónica Fein, para definir la implementación de la tarjeta SUBE, continuaron ayer los cruces entre concejales socialistas y macristas. "Esperamos que el martes el ministro Dietrich le plantee a la intendenta Fein la implementación definitiva e inmediata del sistema, los rosarinos no podemos esperar más", expresó la concejala Verónica Irízar (PS). "Si hay dilación es porque el gobierno municipal quiere mantener la tarjeta MOVI. Pretender una homologación que tarda muchísimo tiempo ha retrasado la llegada de la tarjeta SUBE", afirmó el presidente del Concejo, Alejandro Roselló (PRO), quien acompañará a la intendenta a la reunión que mantendrá con el ministro.
Desde el oficialismo sostuvieron que el que comenzó la polémica fue el diputado provincial del PRO, Federico Angelini, cuando señaló que por cada día que la Municipalidad demora la adhesión, "decenas de miles de rosarinos no pueden acceder al beneficio del 55 por ciento de descuento en el boleto para jubilados y pensionados, beneficiarios de planes sociales, ex combatientes de Malvinas y muchos sectores de los más vulnerables de la ciudad".
La concejala Irízar cuestionó los dichos del diputado Angelini, titular del PRO santafesino. "Apenas asumió Dietrich comenzamos a poner en agenda el tema de los beneficios de la SUBE. Incluso, el ministro en una conferencia de prensa anunció hace dos años que íbamos a trabajar en la homologación de las tarjetas, esa fue la decisión política y a partir de ahí nosotros empezamos a trabajar. En julio del año pasado también reconoció que estaban trabajando en la homologación. Hoy (por ayer) también nos sorprendieron sus declaraciones, creo que es injusto", dijo la edila en diálogo con Rosario/12.
"Haber estado trabajando casi dos años para algo que después te dicen que no se puede homologar es muy extraño. Igual, nosotros nunca pusimos objeciones. El planteo de la intendenta siempre fue que los ciudadanos de Rosario tengan los beneficios de la SUBE porque es el sector más vulnerable de la población. En la reunión del martes esperamos que informen por qué no se puede seguir con la homologación, y cuál será el cronograma para implementarlo. Si ellos ya sabían esto desde julio y no nos los dijeron ya deben tener resuelto cuándo la traen", agregó Irízar.
El presidente del Ente de la Movilidad, Carlos Comi, se sumó ayer a los cruces. "Durante más de 2 años trabajamos en la compatibilización de la SUBE y la MOVI. Y todos lo sabemos. Bajemos un cambio y trabajemos para resolver juntos los problemas de los ciudadanos. El martes la reunión con el ministro Dietrich es una oportunidad", afirmó el ex concejal. Comi defendió a la MOVI al señalar que "es pionera en el país y tiene una multiplicidad de funciones", y fue más allá al señalar que "los dos sistemas pueden convivir".
Por su parte, la concejala Fernanda Gigliani (IP), quien recordó que en noviembre del 2015 ingresó un proyecto en el Concejo Municipal para que el Ejecutivo municipal homologue el sistema de la SUBE, que nunca se trató en la Comisión de Servicios Públicos por "la falta de voluntad política" del oficialismo, planteó que el municipio "se resiste a la implementación de la SUBE para no blanquear la porción que se lleva el Banco Municipal como administrador financiero del sistema y el propio municipio como empresario administrador del 50 por ciento de la flota".
"Apostaría a que a finales de este año podríamos tener el sistema funcionando", adelantó ayer Dietrich en entrevistas radiales, quien dijo estar sorprendido por los cruces mediáticos por la homologación de las tarjetas. "Me llamó la atención este mar de declaraciones", señaló el funcionario. Por otra parte, confirmó que "este año se incrementarán los subsidios al transporte en el interior del país, los subsidios son para todas las ciudades que tienen transporte público", y afirmó que "se entregarán más subsidios respecto a Buenos Aires".