El ascenso de otros cuatro centavos en la última jornada del mes llevó al dólar a marcar su nivel record al cierre de enero, con 19,95 pesos en el promedio de las cotizaciones de pizarra (al público), aunque con operaciones por arriba de los 20 pesos en el transcurso del día. Ello ocurrió particularmente por la mañana, cuando las transacciones en la plaza mayorista (bancos y operadores de comercio exterior) elevaron el precio hasta 19,69 pesos (5 centavos por encima del cierre anterior), pero la posterior aparición de ofertas de divisas desde el exterior estabilizó la cotización en 19,655 pesos, un centavo y medio más que al cierre del martes. Con su precio de ayer, el dólar redondeó una suba del 5,3 por ciento en el mercado minorista y 5,4 por ciento en el mayorista a lo largo de enero, aunque con respecto al 30 de noviembre pasado, en dos meses alcanzó una trepada de más del 13 por ciento, ocho puntos sobre el aumento esperado del IPC del Indec en el mismo período. 

Después del fuerte salto inicial del dólar al comienzo del gobierno de Cambiemos (diciembre 2015 a marzo 2016), el tipo de cambio evolucionó muy lentamente retrasándose con respecto a la inflación acumulada con la gestión de Mauricio Macri. Esta tendencia se revirtió durante el mes de diciembre, incluso antes del anuncio, el 28 de ese mes, del cambio en las metas de inflación del Gobierno, tras el fracaso de la política antiinflacionaria de 2017. Con respecto al valor minorista del dólar del 30 de noviembre, de 17,63 pesos, al día de ayer la cotización marcó un salto del 13,1 por ciento.   

El dólar alto era reclamado, a lo largo de 2017, por empresas exportadoras, por empresas extranjeras que venían demorando el ingreso de divisas al país a la espera de una mejor cotización,y por grandes productores de la pampa húmeda y pooles de siembra exportadores, que venían demorando la liquidación de la cosecha especulando con el mayor valor de la divisa. Del otro lado, el salto del dólar afectará a usuarios y consumidores que ya empezaron a ver reflejados en precios internos (alimentos, combustibles) y tarifas el fuerte ajuste del tipo de cambio de los últimos sesenta días. Para el gobierno, por otra parte, este mismo traslado a precios del aumento del dólar puede volver a echar por tierra con sus políticas y metas antiinflacionarias para el año recién iniciado. Mientras tanto, el ajuste de la cotización tampoco alcanza para resolver el bache que genera la fuga de divisas por transferencia de dividendos al exterior de grandes empresas, un déficit comercial de 8500 millones de dólares en 2017 (sería mayor en 2018) y la salida de divisas por turismo y consumos en el exterior. Por ahora, la única respuesta del gobierno ha sido la mayor emisión de deuda en el exterior (en el último año superó los 30 mil millones de dólares), lo que a su vez genera mayores obligaciones de pagos al exterior en concepto de intereses. 

Aunque el Banco Central se dio una política de “baja paulatina” de la tasa de interés de referencia, el dólar reaccionó en forma acelerada y las expectativas del mercado parecían indicar que no se espera que esta tendencia se detenga. En el mercado del dólar futuro (Rofex) el plazo más negociado fue el 30 días (vencimiento a fin de febrero), con una cotización al cierre de 19,895 pesos, 24 centavos por encima del cierre mayorista de ayer. Por otra parte, el nivel de reservas internacionales del BCRA sufrió ayer un descenso de 163 millones de dólares, aunque todavía se mantiene en un nivel elevado: 62.240 millones de dólares.