El primer día de actividad judicial tras la feria de enero, la fiscal Cristina Herrera pidió a la Justicia de Menores que resuelva la situación procesal de Alan Funes en la causa por el homicidio de Eugenio "Pupi" Solaro. Se trata del expediente por el que Alan debía estar en prisión domiciliaria, pero se lo vio disparando al aire balas de ametralladora, la noche de Año Nuevo, para luego estar prófugo más de veinte días. Según la imputación que le hizo el Ministerio Público de la Acusación (MPA), junto a su pareja, están sospechados de haber matado a Marcela Díaz, el 14 de enero pasado. Menores debe resolver si Funes es responsable del crimen de Solaro, en mayo de 2016, cuando tenía 17. Además, tras la captura, fue imputado en ese fuero por un hecho ocurrido 15 días antes del crimen, cuando baleó a un joven desde una moto.
Acusado por dos homicidios, abusos, portación y tenencia de armas, asociación ilícita y amenazas, Alan Funes está en prisión preventiva hace un semana, luego de haber sido recapturado el 22 de enero pasado. El joven de 19 años está sindicado como miembro de la llamada banda de los Funes, enfrentada a fuerza de balas con los Camino -familia del ex líder de la barrabrava de Newell`s, Roberto "Pimpi" Camino-, en zona sur. El muchacho estuvo prófugo desde que comenzó el año: cuando se lo acusó por el homicidio de Solaro, fue a parar al Instituto de Rehabilitación al Adolescente (IRAR), donde estuvo preso un año y medio, por orden de la Justicia de Menores. Los meses pasaron y no salió fallo de responsabilidad, por lo que en octubre del año pasado recibió el beneficio de la prisión domiciliaria.
Un mes antes, su hermano Lautaro fue detenido en el operativo "Los Miserables", junto a otros sindicados integrantes de la asociación ilícita. Ese día, la celda de Alan fue allanada, en el Irar, pero no lo imputaron por nuevos delitos, más allá de que en la audiencia de la semana pasada, varias escuchas dieron cuenta de que se mantenía en contacto con la banda desde el Instituto; incluso está acusado de proveer las armas, según la fiscal Gisela Paolicelli.
Durante el arresto en su casa, la noche de Año Nuevo salió con una ametralladora, disparó al aire varias ráfagas y el accionar fue filmado, viralizado en las redes sociales y transmitido un canal de televisión. Cuando la Policía de Investigaciones lo fue a buscar a su casa, no lo encontraron. Tampoco el arma.
En esos primeros días del año, fue asesinado su hermano Ulises Funes y, como presunto vuelto, Marcela Díaz, hermana de Tubi Segovia -de la banda de los Camino- fue atacada a tiros. Desde entonces, enero se convirtió en un ida y vuelta de acusaciones entre el Poder Ejecutivo y el Judicial, por los beneficios a presos.
El martes pasado, Alan y su novia, Jorgelina "Chipi" Selerpe, fueron detenidos y se les secuestró un arma calibre 9 milímetros, coincidente con una de las balas que impactó en el cuerpo de Marcela Díaz, el 14 de enero pasado, en Lejarza al 5600. La Fiscalía llevó elementos para dar cuenta de que días antes, la víctima había recibido amenazas de Alan. "Si no te vas después de las fiestas, te mato", le espetó el 29 de diciembre -cuando debía estar cumpliendo domiciliaria-. En el ataque a tiros que mató a Díaz, su pareja sobrevivió. "El testigo declaró que 'Chipi' manejaba la Suran gris. Primero Alan se bajó y le tiró a Nahuel G. (cuando se estaba subiendo a la moto). Fueron seis impactos para darle muerte. La víctima simuló estar muerto. Jorgelina conducía, se bajó con el arma y ambos le dispararon a Díaz", dijo la fiscal Georgina Pairola, cuando les imputó el hecho.
En Menores, Alan tiene dos causas: además del crimen de Solaro, se le imputó un hecho de abuso de armas, que al parecer había quedado traspapelado. Se trata de un ataque del 14 de abril de 2016, en Alice al 5100.