Mañana a las 23, se estrenará la última temporada de The Tunnel por Max, entrega anglo francesa compuesta de seis episodios. La serie en su primera temporada estuvo basada en la nórdica Bron/Broen, trocando las circunstancias que sucedían en un puente por la construcción submarina que une Gran Bretaña con Francia. Aunque en su segunda y en esta tercera temporada, el relato se volvió autónomo. El punto geográfico es ideal para el thriller. Cincuenta kilómetros de oscuridad, comercio internacional, transportes de peso, negocios ilegales y actividades siniestras. Los detectives embebidos de noir son el inglés Karl Roebuck (Stephen Dillane) y la gala Elise Wassermann (Clémence Poésy).
Uno de los logros de esta versión –premiada en varios certámenes– fue haberse dejado teñir por lo más urgente de la realidad del viejo mundo. Así, en estos últimos episodios, se muestra una Europa convulsionada por el Brexit y la crisis de los refugiados, en donde las amenazas del terrorismo y los grupos radicales son el pan de cada día. En este contexto, Roebuck y Wasserman se reúnen nuevamente para enfrentarse a un dúo criminal aterrador. Al mismo tiempo, Karl lidia con el dolor de su familia rota y Elise enfrenta las consecuencias de un error de la justica años atrás. “Es el final para ellos dos y harán descubrimientos que los sacudirán en lo más profundo”, detalló la actriz.
