Los dirigentes de Newell's no tienen plata ni para echar a Juan Manuel Llop. Como sucedió luego del clásico, en diciembre pasado, la intervención judicial que pesa sobre el parque Independencia por irregularidades en la administración recorta facultades en el área del fútbol profesional. Llop no dio señales de renunciar y las autoridades del club se resignan a que el entrenador reflexione y presente su dimisión. El presidente Eduardo Bermúdez quiere despedir al entrenador pero su arrebatada decisión quedó trunca en la tesorería, donde no hay dinero disponible para hacer frente a una indemnización. De igual modo, no está aún confirmada la presencia del técnico en el banco de suplentes para dirigir el sábado ante San Lorenzo. Omar De Felippe y Javier Torrente, primeros opciones a considerar en el parque Independencia.
Con la intervención judicial que impuso el juzgado que entiende en el Fideicomiso de Newell's el pasado mes de septiembre se acabó el despilfarro de dinero en el club. No solo que ya no se pueden comprar jugadores ni pagar comisiones, sino que ni siquiera se puede hacer frente a una indemnización. Solo por esta situación de asfixia financiera es que Llop permanece como técnico de Newell's.
"El ciclo (de Llop) está cumplido", reiteran al unísono las voces en el parque Independencia.
Los dirigentes de Newell's no tienen diálogo entre ellos, de hecho las ausencias en reuniones de Comisión Directiva son moneda corriente. Pero ayer entre los diferentes sectores había desesperación para sacarse de encima al entrenador. Echarlo generará una deuda por indemnización ‑no es opción poner plata en la mesa y despedirlo‑que el juez del Fideicomiso no permitirá. Entonces la estrategia de los directivos se reduce a generar el peor clima de trabajo ‑para eso tienen claras aptitudes‑que lleva a Llop a la reflexión y renuncie.
El entrenador se fue del Coloso en la noche del viernes conociendo el deseo de Bermúdez. Mañana Llop se presentará en Bella Vista a tomar el mando del primer equipo y allí otra vez se le sugerirá que deje el cargo. En caso de persistir, el sábado a las 17 ante San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro será su último partido. "El ciclo está cumplido", reiteran al unísono en el parque Independencia.
El año pasado un dirigente llamó a Omar De Felippe para ofrecerle el cargo. Fue a los pocos días de perder el clásico. Llop no renunció y el juez no autorizó su despido. Por eso aquella negociación quedó suspendida, aunque seguramente se retomará en los próximos días. Aunque hay otro sector de la dirigencia que quiere a Torrente, el ex ayudante de campo de Marcelo Bielsa que tuvo un paso por el club en 2011. Viene de dirigir a León de México.