El gobernador Miguel Lifschitz aseguró ayer que la policía santafesina "respeta los derechos humanos de todos los ciudadanos", al presidir el acto en el que asumió Marcelo Villanúa como nuevo jefe en reemplazo de José Luis Amaya, quien renunció al cargo. El mandatario socialista se despegó del cambio de doctrina que impulsa la ministra de Seguridad nacional, Patricia Bullrich, a partir del aval al policía Luis Chocobar, procesado por haber baleado por la espalda a un adolescente en el barrio porteño de La Boca, cuando dijo que los uniformados santafesinos "actúan permanentemente en el marco de la ley y del estado de derecho". El gobernador fue más allá al señalar que trabajarán "por una provincia segura, que le pueda mostrar con orgullo al país una policía profesional, moderna, democrática, que cuida y protege a su gente". También envió una señal de autoridad cuando dijo que él personalmente dirige el equipo que se encarga de la seguridad, y consideró que son "excepcionales los casos que transgreden esas directivas".
Tras reconocer la tarea del jefe saliente, Lifschitz planteó: "Queremos lograr una sociedad en paz, segura, sin violencia, sin inseguridad, y trabajamos todos los días para lograrlo, sabemos que es posible y los resultados nos avalan", dijo el gobernador, a quien acompañaron en el palco montado en la sede de la URII el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro, los diputados provinciales socialistas, Rubén Galassi y Clara García, y el Fiscal General, Jorge Baclini. "Hoy estamos mejor que hace unos años atrás, y seguramente el año que viene vamos a estar mejor si seguimos trabajando con la misma intensidad", agregó.
"Por supuesto que estamos lejos del ideal, pero sabemos que vamos en un camino de superación permanente, y lo hacemos en el marco de respetar el paradigma de la seguridad democrática. Nuestra fuerza policial actúa permanentemente en el marco de la ley, en el marco del estado derecho, respetando y haciendo respetar los derechos humanos de todos los ciudadanos", reforzó Lifzchitz, marcando una diferencia respecto al gobierno nacional sobre el uso de la fuerza. "Son sólo casos excepcionales en los que se transgreden esas directivas", amplió.
Seguidamente, el gobernador destacó los avances en la prevención con la presencia efectiva y permanente de las fuerza policial en toda la provincia, priorizando la formación y capacitación de los agentes, en la inversión en equipamiento. y el mejoramiento de las infraestructuras edilicias. "Hemos avanzado en la investigación y en la desarticulización de las organizaciones delictivas", afirmó Lifschitz.
Por otra parte, el gobernador dijo que no se quedó solamente en el enfoque policial de la seguridad y que se apoya en un plan integral: "Los fenómenos de la violencia urbana y de la inseguridad en el siglo XXI son complejos, tienen múltiples causas, el narcotráfico, la exclusión social, la violencia de género, los problemas interpersonales, la falta de condiciones dignas de vida para cientos de miles de familias, todo eso contribuye, y son razones que se superponen a la hora de analizar los fenómenos delictivos".
"Hemos avanzado en la investigación y en la desarticulización de las organizaciones delictivas".
Además, dijo que "como nunca antes" se está invirtiendo en la construcción de nuevas cárceles para evitar que los detenidos tengan que permanecer en comisarías, y en los institutos de detención de los jóvenes en conflicto con la ley. "Nada de esto sería suficiente si no priorizáramos también las políticas sociales, las políticas de inclusión de los jóvenes de las barriadas más humildes", apuntó el gobernador, para luego señalar que tiene varios desafíos por delante: "Tenemos que seguir bajando los indicadores de violencia e inseguridad, pero también tenemos que enfocarnos, en una tarea conjunta del gobierno, la justicia y los legisladores, en encontrar herramientas eficaces para combatir el tráfico de drogas y la vinculación inevitable que tiene con los hechos de violencia a los que asistimos cotidianamente".
Más tarde, y en rueda de prensa, el flamante titular de la policía santafesina reforzó los dichos del gobernador sobre el respeto del paradigma de la seguridad democrática. "A los integrantes de la fuerza, desde el Instituto de Seguridad Pública se los mantiene con una cultura permanente por el respeto de los derechos humanos, son materias de cursado obligatorio. Somos una policía democrática, y dentro de esos márgenes nos tenemos que mantener. El respeto permanente por la persona, por más que sea el delincuente, ponerla a disposición de la justicia y sin vulnerar ningún tipo de derechos ni garantías", indicó Villanúa.