El embajador ruso en Turquía, Andrey Karlov, fue asesinado en una exhibición en Ankara por un hombre que le disparó varios tiros por la espalda antes de gritar que lo hacía en "venganza por Siria y Alepo”. Un video del Canal 1 de Turquía mostró el momento en que el Karlov se sobresalta y cae al suelo bruscamente luego de oírse varias detonaciones, mientras daba un discurso en una exposición de fotografía en el centro de Ankara.
Tras disparar, el hombre vestido con traje negro gritó en árabe: "Hicimos un juramento a Mahoma para convertirnos en mártires (...) Esta es una venganza por Siria y Alepo. A continuación habló en turco y pidió: "No se olviden de Alepo. No se olviden de Siria (...) No estarán a salvo. Sólo mi cadáver saldrá de acá”. Karlov murió una hora después en el hospital, según informó la Cancillería rusa en un comunicado en el que calificó el ataque de terrorista.
El alcalde de la capital turca, Melih Gokcek, dijo que el joven atacante era un policía y que era miembro del movimiento liderado por el predicador autoexiliado en Estados Unidos, Fetullah Güllen, el mismo que Turquía acusa de terrorista y de haber planeado el fallido golpe de Estado de julio pasado. Luego, en una conferencia de prensa, el ministro del Interior turco, Suleyman Soylu, confirmó que el autor del atentado era un policía antidisturbios de 22 años, identificado como Mevlut Mert Altintas, que hacía sólo dos años y medio había ingresado a la fuerza.
El ataque ocurrió en la víspera de una reunión en Moscú entre los cancilleres de Rusia, Irán y Turquía, los tres países que mantienen negociaciones desde hace semanas para coordinar la intermitente evacuación de decenas de miles de civiles y combatientes rebeldes sirios en Alepo.
La Cancillería rusa ratificó hoy la reunión de los ministros pese al asesinato del embajador. La evacuación fue fruto de un acuerdo entre Rusia, Turquía, Irán e insurgentes que controlaban la mitad este de Alepo desde 2012. Los rebeldes, apoyados por Turquía, aceptaron el acuerdo al verse vencidos y acorralados por una vasta ofensiva de Siria, Rusia e Irán, tras casi cinco años de enfrentamientos.
Putin: "Apunta a entorpecer la normalización de las relaciones ruso-turcas"
"El crimen cometido es sin duda una provocación que apunta a entorpecer la normalización de las relaciones ruso-turcas así como el proceso de paz en Siria", dijo el presidente ruso Vladimir Putin en su primera reacción ante el asesinato.
Condenas al ataque
El gobierno de Estados Unidos repudió el ataque a través de un comentario en la cuenta de Twitter del vocero del Departamento de Estado, John Kirby. "Condenamos este acto de violencia, independientemente de su origen. Nuestros pensamientos y rezos están con las víctimas y sus familiares", escribió Kirby.
En tanto, la jefa de la Diplomacia de la Unión Europea (UE), Federica Mogherini, calificó el hecho de "inaceptable" y "extremadamente preocupante". Desde Reino Unido, el canciller Boris Johnson dijo estar "conmocionado al oír hablar del despreciable asesinato del embajador de Rusia en Turquía". "Mis pensamientos están con su familia. Condeno este cobarde ataque", aseguró también vía Twitter.
El gobierno alemán también condenó "en los términos más firmes" el atentado "sin sentido". "El atentado contra el embajador ruso en Ankara es una noticia muy triste, El gobierno federal condena en los términos más firmes este acto sin sentido", manifestó el vocero del Ejecutivo alemán, Steffen Seibert.
Al mismo tiempo, la canciller argentina, Susana Malcorra, también se expresó a través de las redes sociales. "Repudio el asesinato del embajador Karlov en Turquía. Mi solidaridad para su familia, amigos y colegas", escribió la funcionaria.