Becarios e investigadores protestaron ayer en el Polo Científico, en rechazo al ajuste en el área de ciencia y en reclamo del ingreso al Conicet de los postulantes que fueron evaluados satisfactoriamente. Los científicos realizaron una permanencia pacífica en el hall del organismo hasta ser recibidos por las autoridades, con las que acordaron volver a reunirse el 9 de marzo. Las organizaciones de investigadores denuncian una nueva reducción de la cantidad de ingresantes a carrera del Conicet y una “discriminación etaria” en la asignación de becas y cargos.
La jornada de lucha de los científicos comenzó por la mañana, con un “abrazo al organismo en riesgo de derrumbe” y una radio abierta, donde los manifestantes solicitaron ser recibidos por las autoridades para evaluar la situación.
Ante la negativa inicial del directorio del Conicet a reunirse con los representantes de las organizaciones, los investigadores resolvieron ocupar el hall del Polo Científico. Tras una hora de toma, un funcionario anunció la decisión de aceptar la reunión. Gerentes y directores del Conicet mantuvieron un encuentro con una comisión de distintas organizaciones junto a algunos de los afectados por el ajuste. Allí, los científicos pudieron plantear sus reclamos, sobre los que las autoridades se comprometieron a dar respuesta en el próximo encuentro. Los investigadores se movilizarán hoy al centro porteño contra las políticas económicas del Gobierno, al igual que el resto de los trabajadores estatales, movimientos sociales y trabajadores de numerosos sindicatos.
“Reclamamos que abran una mesa de negociación y que nadie quede sin trabajo hasta que se solucione el conflicto”, explicó Silvia Nassif, una de las afectadas por los recortes que participó de la reunión con funcionarios del Conicet. Este año hubo más de 2 mil postulantes para ingresar a la carrera de investigador del Conicet y sólo 600 pudieron confirmar su incorporación. Si el Gobierno hubiera respetado el Plan Argentina Innovadora 2020 –vigente hasta 2015 y de cuya elaboración participó el todavía ministro de Ciencia, Lino Barañao–, todos los investigadores que superaron las instancias de evaluación habrían podido sumarse a la carrera del investigador del Conicet. Entre otras metas y propuestas ignoradas por la administración de Mauricio Macri, aquel programa preveía aumentar de 3 a 5 el número de investigadores por cada mil habitantes de la población económicamente activa.
Silvia Nassif es una de las 400 personas que, habiendo obtenido una doble recomendación en sus evaluaciones para ingresar, quedó afuera por el recorte en la cantidad de ingresos que se aplica desde la asunción de Cambiemos.
En la próxima reunión comprometida ayer se discutirá la posibilidad de extender la beca a 90 personas que se quedan sin trabajo a partir de este mes y la eventual creación de nuevos cargos para quienes no ingresaron por los recortes. “Todos somos despedidos en la medida en que perdemos nuestra continuidad en el Conicet”, dijo a PáginaI12 Mercedes Krause, otra de las afectadas, integrante de la organización Jóvenes Científicos Precarizados.
El mismo conflicto tuvo lugar el año pasado, pero en ese caso, y luego de importantes jornadas de protesta del sector, y de largas negociaciones, el Gobierno aceptó generar un programa para reinsertar a los científicos afectados por los recortes en diferentes universidades nacionales. Tal oferta no se puso aún sobre la mesa. “Este año aprendieron de la experiencia anterior y comunicaron los resultados entre Navidad y Año Nuevo”, ironizó Mauro Greco, otro de los afectados, y explicó que eso demoró la organización del sector en esta ocasión.
Además, los científicos alertaron por una “discriminación etaria” en la asignación de becas y cargos, porque alrededor de 400 de los postulantes fueron puestos en una lista aparte por tener más de 35 años y deberán ser reevaluados. Los investigadores afirmaron que la decisión viola la Ley 27.385, que prohíbe la discriminación etaria para la asignación y el concurso de cargos en el organismo. “Se vuelve claro que la cuestión de edad es un modo de regular el ingreso a la carrera académica y de investigación y beneficiar sólo cierto tipo de perfil: joven, hombre y de clase media, media alta”, detallaron los investigadores.