En medio de un importante operativo policial, comenzó ayer en General Roca, Río Negro, el juicio oral por la desaparición del trabajador rural salteño Daniel Solano, que tenía 27 años y de quien nada se sabe desde 2011. Se encuentran imputados siete policías y se espera que declare medio centenar de testigos.
“Luché seis años y medio, quiero encontrar el cuerpo de mi hijo”, dijo al finalizar la primera audiencia Gualberto Solano.
Los policías imputados son Sandro Berthe, Pablo Bender y Juan Barrera como presuntos coautores de privación ilegal de la libertad; Diego Cuello, Pablo Albarran Cárcamo y Pablo Quidel como partícipes primarios del mismo delito; y Héctor Martínez como partícipe secundario. En los siete casos se los incrimina también por vejaciones, abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público. Serán juzgados por los jueces María Evelina García Balduini, Oscar Gatti y Gastón Martín.
Daniel Solano trabajaba en la multinacional belga Expofrut en la localidad de Lamarque, que contrata mano de obra tercerizada, en ese momento a través de la empresa Agrocosecha. Después de que el joven reclamara por sus derechos laborales y los de sus compañeros, en la noche del 5 de noviembre de 2011, fue sacado del local bailable Macuba por la policía y desde entonces continúa desaparecido. “No pudieron parar la lectura de nuestra acusación, diferente a la presentada por la Fiscalía”, destacó a modo de balance el abogado Sergio Heredia.