El hashtag #AbortoLegalYa marcó, esta semana, un récord en el debate público en Twitter al instalarse por cuarta vez consecutiva como primera tendencia en solo cuarenta y cuatro días. La intensa marea verde que se apropia de las redes con mayor frecuencia reafirma entre otras cosas que el debate ya está en la sociedad. Recapitulando, a principios de enero, 20.000 cuentas en la red discutieron el pensamiento arcaico de un actor quien sostuvo que las mujeres se completan siendo madres y pusieron sobre el tapete la realidad del aborto ante embarazos no deseados. Luego, en febrero, dos días seguidos de trending topics por el aborto legal coronaron una semana de presencia feminista en programas de espectáculos donde se reclamó al Congreso no dilatar más el debate legislativo.
A diferencia de las oportunidades anteriores, donde la viralización en redes sociales, se generó como activismo ciberfeminista inmediato para sentar posiciones públicas respecto de debates televisivos, esta semana la acción en torno a #AbortoLegalYa fue parte de la estrategia política de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito rumbo hacia el #8M para incidir en el tratamiento de la ley, junto a la concentración con pañuelos verdes en el Congreso Nacional y las plazas del país. Tanta adrenalina puesta en el tuitazo generó unos resultados que dejó boquiabierta a más de un analista de redes. A escasos minutos del mediodía, el hashtag #AbortoLegalYa trepó entre las primeras tendencias de Twitter para instalarse firme en el primer puesto durante el día.
Sólo en las dos primeras horas planificadas de la ciberacción se involucraron 40.500 cuentas –el doble que en los tuitazos previos– y generaron unos 107.000 tuits, en su mayoría cargados de argumentos para legalizar el aborto, información sobre el articulado del proyecto de ley, el slogan, la historia y los cánticos más pegadizos de la Campaña Nacional junto a relatos en primera persona de las prácticas diarias de abortos, con flyers, dibujos, gráficos, videos y hasta emojis, en una combinación de lenguajes transmediales típicos de la época. De rebote se replicaban tuits en otras redes sociales desde cuentas enlazadas. Al atardecer, innumerables fotos y emotivos videos de la concentración en el Congreso teñido de verde intenso y de plazas repletas de pañuelos ondulantes que clamaban por un derecho que no puede esperar más, permitieron palpitar que la estrategia del tuitazo junto al pañuelazo extendido por el país marcó un hito en la lucha por la legalización del aborto. En definitiva, las redes sociales por momentos operan como cajas de resonancia del grito esparcido desde hace tiempo en las calles y, con intermitencias, también en los medios, que reclama que el tiempo de #AbortoLegalYa es ahora.
Claudia Laudano: (*) Profesora e investigadora de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) especializada en Tics y feminismo.
