El presidente de River, Rodolfo D’Onofrio, habló sobre la finalísima que se disputará el 14 de marzo en Mendoza y deslizó que le propondrá a Daniel Angelici, responsable de Boca, ver juntos el partido desde el palco. “Hay que tratar de que sea una fiesta. No queremos una guerra”, dijo el dirigente en aras de apaciguar la polémica suscitada entre los dos gigantes del fútbol argentino, en particular con los últimos arbitrajes. En este punto calificó de “disparate” que se implique a Mauricio Macri sobre los fallos arbitrales adversos contra su club, y aseguró que el presidente “no tiene nada que ver” con el fútbol porque atiende asuntos “más importantes para el país”.
En conferencia de prensa, D’Onofrio se refirió a la reunión que tendrán por la final de la Supercopa Argentina con Angelici; Claudio Tapia, titular de la AFA, y Horacio Elizondo, director del Colegio de Arbitros. “Hace rato pedimos una reunión para charlar todos y tratar de organizar las cosas de la mejor manera; hay que sacar esta locura y bajar los decibeles. Es fascinante el River-Boca, pero es un juego y se va a ver en todo el mundo. Debemos dar el ejemplo y que sea una fiesta”, señaló el titular millonario, quien añadió que podría organizarse un partido previo entre los senior de Boca y River, y hasta una cena conjunta de todos los jugadores senior y los dirigentes, con participación de la AFA. “La Supercopa es trascendente porque están Boca y River, y hay que disfrutarlo. Es un juego y nada más, donde uno va a ganar y festejará, y el otro estará triste, pero eso no significa que se acaba el mundo”, recalcó D’Onofrio.
Por último, el dirigente contó que el lunes recibió un llamado de Elizondo con relación al mal arbitraje de Jorge Baliño en el empate 2-2 frente a Godoy Cruz. “Es una excelente persona y me pidió disculpas porque no habían cobrado un penal, por el gol en posición adelantada y la jugada increíble del final que nos cobraron”, dijo D’Onofrio.