Newell's: Pocrnjic; San Román, Varela, Fontanini, Evangelista; Bernardello, Rivero, Denis Rodríguez; Fértoli, Torres, Leal. DT: Fabián Garfagnoli.

Temperley: Ayala; Sosa, Bogino, Riveros, Pinto; Brandan, Fattori, Arregui, Di Lorenzo, Orihuela; Muñoz o Figueroa. DT: Gastón Esmerado.

Árbitro: Nicolás Lamolina.

Hora: 19.

TV: Fox 2 (gratis en SD).

Cancha: Coloso del Parque.

 

Buscando un símbolo de paz, como canta Charly García. Por ahí anda Newell's. Porque la ida, natural y necesaria, de Juan Manuel Llop no desactivará todos los frentes de conflicto que tiene el club del Parque Independencia. Porque el problema de la lepra no es solo deportivo, es institucional por sobre todas las cosas. Pero un triunfo, esta tarde noche ante Temperley, traerá alivio, servirá al menos para que todos, hinchas, jugadores y cuerpo técnico, respiren con tranquilidad. Fabián Garfagnoli tomó decisiones de peso, lo mandó al timorato Brian Sarmiento al banco de suplentes y confía que, de quedarse con los tres puntos, puede pasar de entrenador interino a definitivo.

No daba para más el ciclo Llop. El equipo ya no tenía reacciones dentro de la cancha, solo se limitaba a acumular magros resultados y el Chocho rifaba parte del prestigio que se ganó en el hincha rojinegro. Tres derrotas consecutivas decantaron en lo esperado. La dirigencia se tomó su tiempo para elegir su reemplazante e identificó en Gustavo Quinteros al primer candidato a reemplazarlo. Ya hubo una reunión y un aval importante, pero no total, por lo que se aguardará unos días. La CD designó a Garfagnoli como sustituto provisorio, aunque le abrió la puerta a una posible extensión del contrato. Como se ve, todo lo relativo a Newell´s se ata con alambres.

El interino no quiso pasar desapercibido y rápidamente expuso a los jugadores. "Son conscientes que están en deuda", aseguró. Porque más allá de los repetidos errores de Llop, el plantel tiene una cuota de responsabilidad no menor en la posición 23 de 30 equipos en la tabla. "Vamos a hacer todo lo posible para sacar esto adelante. La gente va a tener ansiedad y nosotros vamos a tener que controlarla. Desde el primer minuto (el equipo) va a querer ganar el partido", sostuvo y agregó: "Sabemos que si ganamos ellos (los jugadores leprosos) tendrán otro semblante en la semana. La llevada del nuevo entrenador también los va a fortalecer".

Pero Garfagnoli cree que tiene una bala y la quiere usar. Quedó claro en los entrenamientos de la semana. Al hombre proveniente de las divisiones bajas no le tembló el pulso para tomar decisiones trascendentes. A Sarmiento, de rendimientos pobres reiterados, lo relegó al banco de suplentes, le quitó la cinta de capitán a Porcnij y se la dio a Bernardello, que no era titular indiscutido para el Chocho. Y no se quedó ahí, cambió el esquema y dispuso un 4‑3‑3 mucho más ofensivo, al menos desde las intenciones, que el 4‑4‑2 que proponía su antecesor. Es verdad que los intérpretes de su idea serán los jugadores, y de ellos dependerá su suerte, pero movió la estantería del equipo.