El ministro de Gobierno de Santa Fe, Pablo Farías le dijo a Rosario/12 que el ministro del Interior nacional Rogelio Frigerio le hizo saber al gobernador Miguel Lifschitz que "desde la Rosada se encuentran próximos a realizar una propuesta acerca del pago de la deuda coparticipable". Son los casi 50 mil millones de pesos -calculados con los intereses- derivados del fallo de la Corte Suprema de Justicia. En 2015 el máximo tribunal había decretado que el Estado nacional "deberá cesar en forma inmediata de detraer fondo coparticipables" y además que "debe devolver a las provincias (entre ellas Santa Fe) la suma indebidamente retenida desde el 1º de enero de 2006 más los intereses que correspondan". Cuando se firmó el Consenso Fiscal con las provincias, para Santa Fe introdujo una cláusula en la que el gobierno nacional daría a conocer cuánto y cómo pagará esa deuda millonaria. Farías también habló de la reforma constitucional que quiere Lifschitz y aseguró que para nada "los tiempos para impulsarla están agotados".
Cuando falta poco más de una mes para que se cumpla el plazo de envío de propuesta, Farías aseguró que pronto Nación explicará cuánto y cómo pagará la deuda de coparticipación, que la Provincia estima en 50 mil millones de pesos y ya tiene fallo favorable de la Corte Suprema de Justicia. "Esperemos que sea así", deseó. Aunque, al mismo tiempo, le pegó al gobierno de Cambiemos porque "se han realizado muchas promesas y anuncios y muchos de ellos no se han cumplido", particularmente inversiones de obra pública. "Es imprescindible el cumplimiento de esas cuestiones", reclamó.
Luego de que el gobernador Lifschitz avisara que va a la carga por la reforma constitucional, su ministro Farías se despegó del socialismo de la Legislatura, que había remarcado días atrás que los tiempos para alcanzar la aprobación del proyecto se iban acortando. "No se agotan los tiempos, para nada, a veces hay mucha ansiedad de que esto suceda", le respondió el funcionario político al legislador Eduardo Di Pollina.
"Hay tiempo para aprobar la ley en la Legislatura, para organizar las elecciones de convencional constituyente y realizar la convención, sin que se mezcle con el proceso electoral del año que viene", confió Farías. Pese a que la oposición de diversos colores le notificó que no es parte de sus prioridades, Lifschitz está enceguecido con la chance y así lo hará notar en los próximos días y semanas. Intensificará los encuentros con los bloques políticos y derivará el proyecto de reforma a la Legislatura, donde precisa que sea aprobado por dos tercios de cada una de las dos Cámaras. El gobernador necesita al menos 34 votos en Diputados y 13 en Senadores.
"No se agotan los tiempos, para nada, a veces hay mucha ansiedad de que esto suceda, también hay que respetar los tiempos legislativos o los que necesitan las distintas fuerzas políticas para ordenarse y poder colaborar en este proceso. Pero estamos convencidos que se puede hacer y lo vamos a hacer", dijo el ministro y amplió: "Nos lo hemos planteado desde el inicio de la gestión, el mismo gobernador lo ha puesto en las prioridades de su agenda, la necesidad de reformar la constitución, es algo en lo que coinciden la gran mayoría de las fuerzas políticas, los dirigentes, unidades académicas, instituciones, y este año sigue siendo una posibilidad muy importante".