Un concejal de Pinamar fue detenido acusado de abusar sexualmente de su cuñada de 15 años en reiteradas oportunidades. Su pareja también quedó detenida e imputada por “facilitar el abuso”. Policías de la Subdelegación Departamental de Investigación de Villa Gesell detuvieron al concejal del Frente para la Victoria Claudio Marcelo Galarza, de 52 años, junto a su pareja Rocío Ayelén Salazar, de 24, en una vivienda de la calles Los Álamos y Shaw, en esa ciudad balnearia. El concejal quedó imputado por el presunto delito de “abuso sexual gravemente ultrajante por la duración y las circunstancias de su realización, triplemente agravado por la situación de convivencia preexistente, por ser el encargado de la guarda y por el vínculo en concurso ideal con corrupción de menores doblemente agravado”, según informó la fiscalía. La denuncia contra Galarza había sido presentada el 19 de noviembre del año pasado, cuando la adolescente y su madre relataron en la Comisaría de la Mujer y la Familia de Valeria del Mar que la chica sufría abusos por parte del concejal desde que tenía 13 años. “Según la víctima, había sido abusada en reiteradas oportunidades, tanto en casa de ella, como en la del imputado”, señalaron fuentes de la investigación. En la misma denuncia, la pareja de Galarza y hermana de la víctima quedó señalada como quien “facilitaba el abuso”. Ayer, la madre de la víctima contaba con una custodia policial ya que habría sido amenazada tras la denuncia. La investigación estuvo en manos de la Unidad Funcional de Instrucción 4 descentralizada de Pinamar, a cargo del fiscal Juan Pablo Calderón. Según fuentes del caso, los encargados de llevar adelante la causa, recabaron testimonios, elaboraron informes psicológicos y peritajes médico legales que confirmaron lo denunciado por la adolescente y su madre, por lo que la Justicia de garantías dispuso ayer las detenciones. Según declaró la madre de la adolescente a un medio gráfico, a la chica “La pervertían sexualmente entre tres y cuatro veces por semana. Los primeros meses le hicieron practicar sexo oral y masturbaciones. Y después él empezó a violarla”. De acuerdo a lo relatado por la joven los abusos comenzaron cuando ella tenía entre 12 y 13 años, y la “violación con acceso carnal” recién a los 14. La madre sostuvo que al denunciar a su hija hizo lo correcto, “por más que me duela, porque es mi sangre, es mi hija. Pero no puedo tapar esto”, aseguró.