El único cambio respecto de la propuesta anterior fue la incorporación de una cláusula de revisión del acuerdo salarial en octubre, un compromiso que el gobierno bonaerense ya incumplió en 2016. Bajo esas condiciones, los gremios docentes de la provincia rechazaron ayer la oferta oficial de aumentar en un 15 por ciento los sueldos. “Hasta ahora las tres propuestas hechas por la administración de (María Eugenia) Vidal, a tres días del comienzo de las clases, fueron exactamente iguales, ni siquiera cubren la urgente necesidad de recomponer el salario”, dijo Mirta Petrocini, secretaria general de la FEB, uno de los sindicatos que integran el Frente de Unidad Docente. Los maestros definirán mañana si el lunes empiezan o no las clases. En un escenario similar, lejos también de un acuerdo paritario, los docentes porteños abren hoy el ciclo lectivo, pero ya anunciaron un paro de 48 horas el lunes y el martes próximos. La medida de fuerza podría extenderse a todo el país.
La tercera reunión paritaria bonaerense empezó y terminó como las anteriores. En el Ministerio de Economía provincial, en La Plata, los dirigentes gremiales escucharon la misma propuesta, pero maquillada: un 15 por ciento de incremento en tres cuotas, más un plus por presentismo y –ahora– el virtual compromiso de revisar el acuerdo en octubre. Los maestros rechazan el techo salarial que quiere imponer Cambiemos a nivel nacional (contradiciendo sus propias previsiones inflacionarias); consideran que el premio al presentismo atenta contra la salud de los trabajadores y contra el derecho a huelga; y, tras lo ocurrido en años previos, desconfían del “compromiso” oficial de reabrir la discusión en octubre, por lo que exigen una cláusula gatillo automática.
“Es una vergüenza que nos ofrezcan por tercera vez lo mismo: un aumento que no alcanza ni para pagar la boleta de la luz”, dijo el secretario general del Suteba, Roberto Baradel. “Estamos totalmente desilusionados porque la gobernadora tenía en sus manos la posibilidad de resolver el salario inicial de un docente, que hoy es de 12.500 pesos, y lo más terrible es que nos volvimos a sentar en una mesa que ellos llaman de diálogo y nos volvieron a plantear el 15 por ciento de aumento en tres cuotas. No hay ni siquiera una predisposición al diálogo”, lamentó la secretaria gremial del mismo sindicato, María Laura Torre, quien recordó que “la película del 2016 ya la vimos: no cumplieron y por eso pedimos cláusula gatillo”.
Desde la gobernación, habló el ministro de Economía, Hernán Lacunza. Se limitó a decir que “siempre se mejoró la propuesta anterior para ir acercando posiciones entre las pretensiones de los gremios y las posibilidades de la provincia”.
Hasta anoche no se sabía cuándo será la próxima reunión paritaria. Si no hay novedades en las próximas horas, los sindicatos docentes realizarán asambleas mañana y analizarán parar la semana que viene.
En Capital
Ayer también hubo un nuevo encuentro de la paritaria docente en la Ciudad de Buenos Aires, en la sede de la cartera de Educación. La administración de Horacio Rodríguez Larreta mantuvo su oferta, que está debajo incluso del techo fijado por la Nación: 12 por ciento de incremento, en dos cuotas. A esa cifra le añadió otros 3 puntos en compensación por la inflación de 2017, un adicional de mil pesos y la posibilidad de volver a discutir salarios en septiembre. Los representantes de los 17 gremios docentes del distrito rechazaron la propuesta.
“El aumento sigue siendo del 12 por ciento. El 3 por ciento es una deuda del año pasado, por la cláusula gatillo que no se cobró”, aclaró Mariano Denegris, dirigente de UTE. Ese gremio, enrolado en la Ctera, convocó a una huelga el lunes y el martes próximos. La misma medida resolvió tomar otro gremio docente: “El 12 por ciento que ofrece el gobierno de Larreta es directamente una provocación, por lo que iremos al paro”, ratificó Amanda Martín, secretaria adjunta de Ademys. Los gremios docentes no descartaron que haya una nueva reunión paritaria en los próximos días, antes del paro.