La policía alemana detuvo en Berlín a Andrei Kovalchuk, el presunto líder de la banda que intentó traficar 389 kilos de cocaína en 12 valijas diplomáticas que estaban ocultas en el anexo de la Embajada de Rusia en Buenos Aires. El empresario de origen ruso, que en la investigación que realizó la Unidad Antidrogas de Gendarmería bajo el nombre de operación “12 Reinas” era señalado como el dueño del cargamento, será indagado en los próximos días y extraditado a Rusia, donde se realizó una investigación paralela.
Kovalchuk, de 50 años, fue detenido el jueves por la noche en un suburbio de Berlín, según informó su abogado, Vladimir Zherebenkov. El letrado, que fue alertado de la situación por Anna, la esposa del empresario, confirmó que la detención estaba relacionada con “el caso de narcotráfico y que el en los próximos días declarará ante el juez”.
Días atrás, el empresario, representante de la empresa Bossner, una marca dedicada a la venta de productos premium: habanos, chocolates, cognac, entre otros, y conocido por hacer actos de beneficencia en Alemania, había asegurado a través de su abogado que era víctima de una “provocación” y que las fuerzas de seguridad argentinas y de EE.UU. le “pusieron” la droga para acusarlo.
Con la detención del empresario, en la investigación que comenzó con la denuncia del embajador ruso en Argentina, Viktor Koronelli, ya son seis los integrantes de la banda detenidos: el inspector de la Policía de la Ciudad Iván Blizniouk, de 35 años, y el ciudadano ruso Alexander Chikalo, ambos detenidos en Argentina; y tres apresados en Rusia: Ali Abyanov, ex funcionario de la sede diplomática, e Ishtimir Khudzhmov y Vladimir Kalmykov, dos ciudadanos rusos que se presentaron a retirar las valijas en Moscú, cuyo contenido personal de Gendarmería había reemplazado por harina.
Según los registros de migraciones, Kovalchuk ingresó once veces a la Argentina entre 2013 y 2016. La última vez fue el 11 de octubre del año pasado, cuando intentó sacar las valijas de la embajada que, según surge de la investigación, el empresario habría ingresado a la sede diplomática en complicidad con Ali Abyanov, el ex administrador económico, que se jubiló en julio de 2016.
Mientras sus pasos eran seguidos y fotografiados, y sus conversaciones telefónicas escuchadas por el personal de Gendamería Nacional que estaba detrás de la banda, el empresario se reunió en el centro porteño con el policía de la Ciudad Iván Blizniouk en tres ocasiones; con Alexander Chikalo, al menos dos veces; con un funcionario de la embajada que estaba colaborando con la justicia y con los dos ciudadanos rusos que luego fueron detenidos en Moscú al retirar las valijas. Además, hubo un encuentro entre el empresario, Blizniouk y Chikalo que no se pudo fotografiar.
Finalmente, Kovalchuk y sus socios regresaron a Rusia el 18 de octubre en un vuelo privado de bandera letona, oportunidad en la que le comentó a Blizniouk que lo habían “controlado bastante” en Ezeiza y hasta le habían sacado fotos a su pasaporte.