El ministro de Ambiente, Sergio Bergman, salió a dar explicaciones sobre la polémica creación de un parque nacional en el predio de ocho mil hectáreas de Campo de Mayo, que fue anunciado por el presidente Mauricio Macri en el Congreso, y aseguró que “las áreas que tengan que ver con la memoria, la verdad y la justicia no serán tocadas y su preservación quedará asegurada”, además de precisar que la Secretaría de Derechos Humanos será parte de la mesa de trabajo que elaborará el plan de puesta en marcha del parque, que ocuparía la mitad de las ocho mil hectáreas del predio. El abogado de Abuelas de Plaza de Mayo, Alan Iud, advirtió que los funcionarios de la Secretaría no pueden reemplazar la voz de los organismos de derechos humanos y las víctimas de los delitos de lesa humanidad cometidos en esa guarnición militar de la zona norte del conurbano y que “no solo tienen que preservarse los espacios ya identificados donde se cometieron violaciones a los derechos humanos sino la posibilidad de encontrar en cualquier parte del predio los cuerpos de quienes aún están desaparecidos”.
Bergman salió a poner paños fríos a lo que Macri presentó como un hecho consumado y que generó una rápida respuesta conjunta de los organismos de derechos humanos, que se enteraron por cadena nacional de la decisión de realizar un parque nacional en Campo de Mayo, donde funcionaron al menos cuatro centro clandestinos, nacieron bebes en cautiverio que fueron apropiados y despegaron “vuelos de la muerte”. “No vamos a tocar nada y vamos a respetar la zona del memorial a las víctimas”, aclaró el ministro de Ambiente y agregó que “las áreas que tengan que ver con la memoria, la verdad y la justicia no serán tocadas y su preservación quedará asegurada”.
Iud explicó que “si bien ya hay lugares identificados donde hubo personas cautivas en los centros clandestinos de detención, hay que tener presente que en el resto del predio se han realizado excavaciones en busca de restos humanos, según las denuncias que se fueron recibiendo, pero el trabajo no puede considerarse concluido”.
De todas formas el ministro adelantó que “entre 3.000 y 4.000 hectáreas sean destinadas al establecimiento” del parque proyectado por el presidente. “Cualquier iniciativa debe tener en cuenta que no se pueden hacer modificaciones en el terreno que dificulten una excavación”, indicó Iud respecto de la posibilidad de que se reciban nuevas denuncias en las investigaciones abiertas por los delitos cometidos en la guarnición militar. En ese sentido, indicó que Abuelas solicitará ante la jueza federal de San Martín, Alicia Vence, la ampliación de la medida de no innovar dictada en el marco de la causa Campo de Mayo, que impide realizar modificaciones sobre los lugares ya identificados.
En cuanto al reclamo de los organismos, el ministro Bergman dijo miembros de la Secretaría de Derechos Humanos, encabezada por Claudio Avruj, “formarán parte de una mesa de trabajo junto con otras dependencias como Defensa, y la Provincia de Buenos Aires, que trabajarán para analizar como se pone en marcha este parque”. Pero Iud aseguró que “no alcanza con eso” porque “las víctimas son las que tienen el derecho a participar de manera directa, no puede delegarse. Tienen que ser escuchadas ante cualquier decisión que se tome sobre un espacio en el que sus seres queridos pueden ser encontrados”, aseguró. Por su parte, Agustín Cetrángolo de H.I.J.O.S. Capital sostuvo que “si quieren hacer un parque nacional que hagan uno de la memoria y que convoquen a los organismos, a los sobrevivientes, a los familiares para construir un parque abierto al público donde se ejercita la memoria”.