"Si hay un debate por despenalizar el aborto quiere decir que hasta hoy la ley argentina contempla que hay una vida y por eso pena el aborto. No tengo argumentos que me prueben a mí algo diferente a eso". Con estas palabras, Esteban Bullrich volvió a tomar la delantera dentro de la corriente de legisladores antiabortistas tras la presentación del proyecto para interrumpir el embarazo, que ingresó hoy al Congreso.
"Hablamos mucho de aborto, pero no hablamos de lo que está detrás que es el embarazo no deseado. Estamos atacando la consecuencia y no la causa, y el Estado debe atacar las causas de los problemas”, ponderó el senador por la provincia de Buenos Aires, para quien “el Estado debe prevenir los problemas y debe defender la vida siempre”.
Bullrich fue más allá y confirió estatus de persona jurídica a un embrión. "¿Es ese embrión un argentino con derechos o no es un argentino con derechos?", preguntó, para contestar: "Hoy la ley dice que sí y que no hay suficiente información para probar lo contrario y creo que en la duda tenemos que defender la vida". Y profundizó sobre esa idea. "Si vos tomás un espermatozoide por sí solo no tiene la potencialidad de transformase en un ser humano. Hay un proceso que comenzó desde la concepción que va a formar a una persona. Ahí está el núcleo de la discusión”. En su opinión, en ese momento hay “un tejido genéticamente diferente a la de la madre, que no es ni el óvulo ni el espermatozoide. Es un tejido nuevo, que luego se desprende de la piel. Ese embrión que está en la panza de la madre tiene un código genético diferente, hay un ser que empieza a formarse. La interrupción de esa formación es como cualquier interrupción que ocurre a lo largo de la vida".
También consideró que "interrumpir es una palabra sensible para utilizar porque no se está interrumpiendo, se está terminando con esa vida”, y que por lo tanto “el Estado no debería habilitar eso, sino que debería hacer todo el esfuerzo para que ese argentino o argentina que se está empezando a formar dentro de la panza de la madre sea defendido, porque no tiene voz". Sin embargo, aceptó que se trate el aborto. "Entiendo que haya diferencias y es positivo que demos este debate", opinó en Radio Con Vos.
El senador puso además en duda la cantidad de abortos clandestinos por año y equiparó a las mujeres que mueren en pésimas condiciones sanitarias con los fetos. “Creo que 500 mil abortos clandestinos es una cifra exagerada, pero seguramente son miles, decenas de miles o centenas de miles”, manifestó, para considerar que “si se toman las 42 muertes de madres que se producen por abortos clandestinos, ¿eso justifica la muerte de 500 mil embriones?” Y pidió medidas desde el Estado “para que no lleguemos a tener 500 mil embarazos no deseados que terminan en la solicitud de un aborto clandestino y esas 42 muertes". Lo hizo quien fuera ministro de Educación a nivel porteño y nacional y no aplicara el Programa de Educación Sexual Integral en las escuelas.
Por Twitter, la alusión al embrión como sujeto de derechos despertó comentarios.