“Los líderes políticos deberían ser receptivos de los principios éticos y no dejarse llevar por las encuestas”, afirmó el secretario de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, Santiago Cantón, para explicar por qué la gestión que encabeza María Eugenia Vidal no adoptará el reglamento de mano dura que para las fuerzas de seguridad que promueven el presidente Mauricio Macri y la ministra Patricia Bullrich. “El protocolo para las fuerzas de seguridad federales no respeta los principios esgrimidos desde Naciones Unidas, por lo que el uso de armas de fuego queda diluido y resulta ser vago por lo que genera un peligroso antecedente para la ciudadanía”, añadió Cantón.
Apenas se inició la polémica por el reglamento de Bullrich, desde el entorno de la gobernadora Vidal dieron a entender que en la provincia no lo imitarían. La explicación era que en un territorio tan caliente como el de la provincia y con una fuerza tan grande y con tantos problemas como la Bonaerense, habilitar el gatillo fácil podía derivar en un escenario imprevisible. Pero, hasta ayer, ninguna voz oficial había salido a confirmarlo. Lo hizo Santiago Cantón y en términos bastante duros. Desde su oficina dieron a entender luego que lo hacía con el aval de Vidal.
“Da la impresión de que el protocolo planteado por la Nación es un riesgo para todos y se acerca más a lo que dicen las encuestas de opinión sobre la mano dura que a principios éticos que deben guiar a una sociedad”, expresó el secretario de Derechos Humanos y ex titular de la CIDH al portal Infobae. En especial, remarcó el momento de tensión social que se vive no sólo en el país sino en el mundo. “Hay una polarización social, donde los valores retrocedieron ante la aparición de la xenofobia y del antisemitismo”, añadió. Por otro lado, Cantón advirtió que la provincia no necesitaba adherir al protocolo porque ya cuenta con una ley específica que regula el accionar de la Policía Bonaerense.
“Nosotros tenemos una ley que rige la utilización de armas de la policía, que es del año 2006 y es muy actual. Vamos a trabajar con esa ley y con la capacitación y el entrenamiento que estamos haciendo”, ya había aclarado el secretario de Seguridad, Cristian Ritondo. A diferencia de Cantón, Ritondo no objetó la nueva directiva nacional. “Creo que esto es una buena iniciativa respecto a la unificación de criterios en relación con las fuerzas federales”, deslizó.
Más allá de las consideraciones específicas sobre el protocolo, lo cierto es que desde hace un tiempo a la gobernadora Vidal le gusta mostrar un perfil diferenciado al del gobierno de Macri, lo que para algunos es demostración de sus intenciones presidenciales. Por ejemplo, la gobernadora anunció el pago de un bono de fin de año de 7 mil pesos para los empleados estatales bonaerenses –es decir, 2 mil pesos más que el establecido a nivel nacional– y también 3500 pesos para jubilados y pensionados de la provincia que perciben menos de 10 mil pesos.