Diego Maradona tomó claro partido en la interna de Boca y atacó duramente al ex presidente Pedro Pompilio, de quien dijo que “se le subió la presidencia a la cabeza y se portó muy mal” con Mauricio Macri. Pompilio competirá en las próximas elecciones en Boca, previstas para el 1º de junio, contra una lista que responde al jefe de Gobierno de la ciudad. Maradona descartó la chance de enrolarse en esta última. “Me gustaría ser la cara visible y poder tomar decisiones, pero no creo estar preparado para dirigir un club como Boca”, afirmó.

“Pompilio fue creado por Macri. A Macri lo noté muy dolido. Y cómo no va a estar dolido –se preguntó Maradona– si la persona que pone él en el cargo hace la de él, no lo llama en un montón de tiempo y no le consulta nada”, señaló el astro. Lo curioso es que, más allá de alguna referencia puntual a un determinado acierto, Maradona nunca había hecho un elogio tan encendido de la gestión de Macri en los doce años de su mandato.

Maradona reveló que mantiene una relación estrecha con Macri. “Yo hablé la semana pasada media hora por teléfono con él y lo noté muy disgustado, traicionado, como esas personas que ya no sienten la amistad como creían y me parece que si Pompilio no se baja del caballo la lista de Macri se viene de cabeza”, dijo, en relación con la posibilidad de que el macrismo presente una lista opuesta a la de Pompilio en las próximas elecciones del club en caso de no llegarse a una consensuada. “Para mí, si traicionó una vez, puede volver a traicionar.”

Maradona, que alguna vez motejó de “cartonero Báez” al ex presidente Macri, ayer se alineó claramente con el dirigente. “Con él, Boca era un club europeo y con Pompilio tuvo un montón de quilombos que no sucedían desde la época de Heller y Alegre.” Cuando Alfio Basile era técnico, Maradona había asumido una función parecida a la de manager, pero al poco tiempo se distanció del entrenador y de Macri, por lo que esa labor quedó archivada, sin demasiadas explicaciones.

En los últimos meses, Maradona no había estado de acuerdo con Pompilio en la salida del entrenador Miguel Angel Russo y mucho menos con la designación de su reemplazante. “Hasta el momento de asumir en Boca yo tenía más relación con el hijo que con él”, pero señaló que le llamó la atención en su momento la decisión de colocar como entrenador a Carlos Ischia, “después de que nosotros habláramos del Mellizo (Guillermo Barros Schelotto) y de (Diego) Cagna”. Cuando asumió Pompilio, se habló de que Maradona iba a cumplir una función como asesor, algo que nunca se llevó a cabo en la práctica.

“Como siempre, voy a ser incondicional para Boca y si Macri cree conveniente que yo tenga que estar en una lista y darle una mano al club en este momento en que lo necesita el presidente, yo voy a estar”, sentenció Maradona.