El triunfo significa la gloria, el reconocimiento, pero en Fórmula 1 no siempre se traduce en un beneficio económico. No se sabe exactamente cuánto le costó a Ferrari ser campeón mundial en 2007, porque los balances todavía no han sido presentados, aunque el equipo italiano tenía un presupuesto aproximado de 400 millones de dólares. Pero, según los balances de 2006, conquistar el título mundial con Fernando Alonso le costó a la escudería Renault un rojo de 4,8 millones de dólares. Y ahora, que volvió a contratar –por una cifra sideral– al piloto español para disputar el Mundial 2008, que arranca el domingo próximo en Australia, el improbable título podría resultarle el único consuelo.

Según los balances completos de los últimos años, el equipo Renault que dirige el italiano Flavio Briatore logró pequeños éxitos en la columna del haber durante 2004 (2,5 millones de euros) y 2005 (2 millones). La caída en el rendimiento acaso esté relacionada con el “detalle” de que fue en 2005 que Alonso ganó el primer campeonato para la escuadra, que construye sus chasis en Enstone (Inglaterra) y recibe los motores que la empresa del rombo maquina en Viry-Chatillon (Francia). La necesidad de mantenerse en la cresta de la ola victoriosa hundió la cuenta corriente en el 2006.

Para esta temporada, Renault rescató a Alonso de su contrato con McLaren prometiéndole pagar 35 millones de euros por toda la temporada, casi 3 millones de euros por cada Grand Prix en el que compita. En 2006, el equipo había gastado 180 millones de euros, un cuarto de esa cifra en los sueldos de sus 526 empleados, de los cuales alrededor de 100 concurren a cada uno de los 18 Grands Prix de la temporada. El que más cobraba entonces era Alonso (8 millones de euros anuales). En la nómina lo seguía el propio Briatore (1,15 millón).

A los gastos que figuran en los libros del equipo hay que sumarles el costo de los 80 motores V8 de 2,4 litros de cilindrada que produce la propia fábrica Renault en Francia para impulsar a los coches que en este campeonato conducirán Alonso y Nelson Piquet Jr. La estimación que hicieron Christian Sylt y Caroline Reid en su libro Formula Money es que ese costo superó, en 2006, los 115 millones de euros.

Por haber ganado el título del 2005, la escuadra cobró un premio oficial de más de 20 millones de euros y sus principales sponsors, una tabacalera japonesa y una petrolera francesa, aceptaron cederle entonces unos 57 millones de euros para toda la campaña 2006. Aun así, los numeritos quemaban al final de la temporada.