En sólo 90 minutos el sur dio un giro de 180 grados y toda la fiesta de Lanús se mudó para Banfield. El equipo de Juan Manuel Llop llegaba asfixiado pero jugó el clásico como una final y consiguió un histórico 5-0 con goles de Darío Cvitanich –dos veces–, Maximiliano Laso, Luciano Civelli y Fabián Santana. Lanús arrancó mejor pero poco a poco se fue desmoronando, y perdió un invicto de 19 partidos en su cancha.

Hace un par de meses, cuando Sand, Valeri y compañía daban la vuelta olímpica en La Bombonera, Banfield cerraba un buen torneo Apertura pero tenía en la boca el gusto amargo de la alegría ajena. Más acá en el tiempo, ya con el Clausura en juego, comenzaron los reclamos a Llop y el clima se tornaba cada vez más complicado, mientras Cabrero y los suyos seguían por la senda positiva tanto en el certamen local como en la Libertadores. Pero ayer todo dio un giro, de esos que poco tienen que ver con la lógica y mucho con el fútbol.

La diferencia estuvo en cómo afrontó cada uno el clásico. Para Lanús era un partido, para Banfield era “el” partido. En el comienzo el local fue superior y casi capaz de abrir el marcador con un cabezazo de Valeri que salvó Lucchetti. Las luces del 5-0 seguramente olvidarán esa bola que el uno sacó al corner pero allí, en la seguridad de su arquero, Banfield empezó a ganar su partido. En el otro extremo de la cancha estuvo el otro hombre clave del clásico: Darío Cvitanich. Incansable como siempre, el delantero desgastó a los defensores rivales y dejó su huella con dos goles. A ellos hay que sumarle a Laso, quien no sólo abrió la cuenta sino que corrió a todos los que le pasaban cerca. A Civelli, que marcó el tercer gol, el que desmoronó las ambiciones de Lanús. Y al resto del equipo y al mismo Llop, que salieron con el pecho inflado cuando todo parecía adverso.

Llueve mucho pero allí en aquel rincón todos saltan. Esta vez la alegría fue de ellos. Se mudó un par de estaciones y les dio una caricia a los que llegaban golpeados. Fue un 5-0 histórico. La vuelta al sur en 90 minutos.

Informe: Mariano Verrina.