A pesar de que mucho se tuvo que sufrir, el acuerdo finalmente llegó. Luego de más de ocho horas de reunión en la sede de Futbolistas Argentinos Agremiados, las autoridades del gremio y los responsables del Organo Fiduciario que controla a Racing llegaron a un arreglo, por lo que los jugadores del plantel conducido por Juan Manuel Llop volverán hoy a los entrenamientos. Los administradores del club aportaron un millón y medio de pesos para ir paliando la deuda con el plantel y los otros dos millones que quedan pendientes los abonarán en cinco cuotas de 400.000 pesos –saldrían de los ingresos de la televisión– según prometieron. Así luego de cuatro días de cruces y tensión, en Racing hay un poco de tranquilidad.

Pero durante el transcurso del día no todo parecía indicar que se iba a llegar a “la solución”. Durante el mediodía había corrido un rumor que sostenía que los administradores de la entidad se habían comprometido a pagar un millón y medio de pesos –el 42 por ciento de la deuda– y que todo estaba solucionado, con lo cual la huelga de los jugadores se levantaba. Sin embargo nada de eso sucedió. “Por ahora no hay nada en concreto”, afirmaron desde Futbolistas Argentinos Agremiados. Y la tensión creció.

La llegada de Néstor Bugallo y Carlos Ves Losada, otros dos integrantes del Organo Fiduciario, a las 18 hizo imaginar un final rápido y feliz. “Venimos a firmar, está todo arreglado”, señalaron. Pero la reunión continuó extendiéndose y así lo hizo durante cuatro horas más.

Mientras tanto, llegaban otras noticias desde Avellaneda. Perjudicado por el parate y el tiempo perdido de cara a una preparación diezmada, el conjunto conducido por Juan Manuel Llop desistía de presentarse en el Torneo de Invierno y su lugar era ocupado por Gimnasia, que finalmente el próximo domingo enfrentará a Independiente a partir de las 15 en el Estadio Unico de La Plata. El temor de enfrentar al clásico rival y sin los entrenamientos necesarios, hizo prevalecer la decisión del cuerpo técnico de bajarse del certamen sobre la idea de jugarlo de cualquier modo para sumar divisas al club.

Así pasaron las horas hasta que se llegó finalmente a una solución. El acuerdo se estiró porque las partes se mostraron inflexibles y se cruzaron muy duro entre sí, desde la última reunión que mantuvieron el viernes pasado. El titular del Agremiados había sostenido el último fin de semana que los funcionarios que administran Racing arrastran al club al “desastre”. Y en réplica, Eduardo Gilberto, uno de los integrantes del Organo Fiduciario, había dicho que esperaba que “el gremio salga de su intransigencia, que entienda que el club va a pagar lo que tiene que pagar y no lo que ellos nos quieren imponer”.