Desde San Antonio

Si los San Antonio Spurs quieren tener un inicio de temporada fulgurante en la NBA tendrán que aceptar que deberán lograrlo sin una de sus grandes figuras, Emanuel Ginóbili, que cree que estará fuera de las canchas alrededor de dos meses. “Ellos me dijeron de ocho a 12 semanas, así que espero que sean ocho”, dijo Manu en la apertura de la sesión de entrenamientos de la franquicia con vistas a la temporada 2008-2009 que se iniciará el próximo 28 de octubre. Ginóbili fue sometido a una artroscopia en su maltrecho tobillo izquierdo realizada el 3 de septiembre, tras ganar con la Selección Argentina la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Beijing. Al escolta le gustaría reaparecer “para el comienzo de la temporada regular”, pero sabe que en el cuerpo médico de los Spurs “serán muy cautelosos” y quieren que esté “al 100 por ciento” antes de hacerlo jugar.“Ellos tienen el plan, hablaron de la operación y saben lo que están haciendo”, señaló el bahiense, que reconoció que cuando sintió el dolor que lo dejó afuera del primer cuarto de la semifinal frente a los Estados Unidos en Beijing supo que una intervención quirúrgica “era inevitable”. La operación, que intenta solucionar los problemas en la articulación que arrastra el jugador desde hace mucho tiempo, fue bien vista por Gregg Popovich, entrenador de San Antonio. “Si no se hubiese agravado la lesión en los Juegos, probablemente hubiese pasado 15, 25 o 35 partidos después, durante la temporada. Podría ser una bendición la operación, porque imagino que su tobillo estará en mejor estado de lo que estuvo en años”, analizó Popovich. Ginóbili coincidió: “Es algo bueno (la operación) porque la recaída podría haber sido en diciembre. En cualquier caso, siempre gano”. Durante las tres primeras semanas transcurridas en la rehabilitación, el argentino hizo “básicamente nada”, aunque ya observa una mejoría. “Ya no lo tengo hinchado y caminar se siente muy bien”, cerró.