El plantel de Independiente, siguiendo una costumbre que instituyera un hombre “de enfrente”, el Mostaza Merlo, se niega a pronosticar, soñar despierto o ni siquiera especular con una fecha de adelanto. Si bien la mayoría de los hinchas ya piensa en el decisivo encuentro ante Boca en la decimoctava fecha del campeonato, el volante Federico Insúa, quien en los últimos encuentros –cuando Daniel Montenegro no fue la manija ni brilló por lesión o marca excesiva– se hizo cargo del equipo, advirtió que no quiere saltear objetivos y que la próxima meta es Banfield.
“Nosotros no sacamos ninguna cuenta. El equipo volvió a levantar y sigue ganando. Sacando dos empates saldremos campeones. Pero queremos ganarle a Banfield para asegurarnos. No pensamos en Boca. No nos preocupa. ¿Cuál es el problema que gane Boca en la próxima fecha? Si después tenemos que jugar en Avellaneda”, manifestó el ex Argentinos.
Con relación al encuentro frente a Unión, Insúa aceptó que su equipo levantó el nivel con respecto a la actuación frente a Chicago y remarcó que el bajón futbolístico de su equipo “no es tan pronunciado”, aunque admitió: “Se sufre porque la gente de afuera nos ve ganando 1-0 y parece que el equipo dejara una deuda. Antes goleaba y ahora ganar por uno parece poco”.