DEPORTES › REPUBLICA CHECA SE IMPUSO EN EL DOBLES Y LIDERA LA SERIE 2-1
La dupla Acasuso-Mayer poco pudo hacer ante los experimentados Berdych y Stepanek, que se impusieron en tres sets en menos de dos horas. A partir de las 8, Del Potro está obligado a ganarle al uno local para que luego Mónaco pueda definir el match ante Stepanek.
José Acasuso y Leonardo Mayer no pudieron oponerle demasiada resistencia a Tomas Berdych y Radek Stepanek, por lo que los checos vencieron con facilidad 6-1, 6-4, 6-3 en el punto del dobles y tomaron una ventaja clave de 2-1 en la serie de cuartos de final de la Copa Davis. Con este resultado, el equipo argentino está obligado a ganar los dos puntos de singles para adjudicarse la serie y avanzar a las semifinales. A partir de las 8, Juan Martín del Potro se medirá ante Berdych y, en caso de ganar, luego Juan Mónaco definirá el match ante Stepanek.
En el dobles de ayer no hubo equivalencias entre una pareja que funcionó a la perfección y otra que se vio sometida y que sólo por momentos estuvo a la altura de las circunstancias. “Ellos juegan muy bien en esta superficie y casi no nos dieron chances. En el comienzo salieron a atropellarnos y lo consiguieron y después dejamos pasar algunas oportunidades”, explicó Acasuso sobre el desarrollo del partido.
Los europeos arrancaron de manera demoledora. Les quebraron el servicio a Mayer y Acasuso, cedieron sólo cinco puntos en cuatro games y se mostraron sólidos tanto en el turno de sacar como en el momento de devolver. En un primer set, que duró apenas 23 minutos, los argentinos, apabullados por sus rivales y también presos de los nervios, sólo pudieron ganar un game –saque de Mayer–, ya que Acasuso perdió nuevamente el suyo.
La primera desconcentración de los checos ocurrió en el game inicial del segundo set cuando tuvieron que levantar dos break points en el saque de Stepanek, lo que animó a los visitantes, pese a que no pudieron ganar el juego. Con una actitud más desinhibida y tratando de tomar más la red, los argentinos lograron emparejar el encuentro en el segundo parcial, aprovechando también que los checos bajaron la intensidad de su juego y cometieron algunos errores desde el fondo de la cancha. Con cada dupla manteniendo el saque, el encuentro se hizo sumamente parejo hasta el décimo game, cuando Mayer cometió tres errores consecutivos en la red y Argentina resignó el saque y el parcial.
En el primer game del tercer set, los locales volvieron a tener un instante de distracción y –esta vez sí– los argentinos le pudieron quebrar el saque a Berdych, lo que provocó el griterío de los 50 simpatizantes argentinos presentes en el estadio Cez Arena. No obstante, la alegría duró apenas un par de games, ya que en el cuarto juego Acasuso se volvió a mostrar impreciso con su saque y los checos, con un Stepanek más prendido que nunca en el partido, le quebraron el servicio para luego encaminarse a un triunfo que nunca corrió riesgos. “No aflojaron nunca. Esta es su superficie preferida y la pelota volaba. En algunos momentos tratamos de arriesgar un poco, pero jugaron en un nivel increíble”, reconoció Mayer. Ahora, sólo queda ganar los dos singles para llegar a la semifinal.
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