Aquejado por los malos resultados de Huracán en el Apertura y desgastada completamente su relación con los dirigentes del club, que ya pensaban en un sucesor, Angel Cappa anunció que en diciembre dejará de ser el entrenador del equipo de Parque de los Patricios al considerar que llegó el fin de un ciclo. Miguel Brindisi sería su reemplazante.

“La decisión ya está tomada, no sigo”, dijo Cappa, y enfatizó que su ciclo como técnico de Huracán “se terminó cuando se desarmó el equipo” luego del subcampeonato en el anterior torneo Clausura.

En tono de lamento, señaló que “la campaña es mucho peor” de lo que él imaginaba, pero a su vez remarcó que “como se dieron las cosas no se podía hacer una buena campaña”, en alusión a las ventas y desvinculaciones de Javier Pastore, Matías Defederico, Carlos Araujo, Carlos Arano y César González, entre otros.

“El equipo se fue armando de apuro. Los jugadores vinieron unos días antes, contra Lanús armamos el equipo casi en el vestuario. Cuando las cosas se hacen mal, no pueden salir bien, pero no pensaba que podían salir tan mal”, explicó el técnico, que continúa aún en su cargo a pedido de los futbolistas, que le hicieron revertir la semana pasada su decisión de renunciar de inmediato.

Cappa reconoció que todo ello llevó a que “la relación con los dirigentes se desgastara”, porque no priorizaron el mantenimiento del equipo y “la confianza comenzó a mermar porque los resultados tienen ese efecto”.

Tras señalar que les quedan partidos importantes, como el clásico del sábado ante San Lorenzo y el enfrentamiento ante Boca, remarcó que se quiere ir “bien, con un buen recuerdo”.

“Los ciclos se terminan y éste se rompió cuando se deshizo el equipo. Fue un cachetazo muy fuerte, porque era un equipo para continuar, para pelear el campeonato y, sin embargo, se deshizo brutalmente, a patadas, y eso nos golpeó a todos. Seguí con el compromiso, sabía a lo que me arriesgaba y lo pagué caro”, agregó. Huracán, subcampeón en el Clausura 2009 siendo el equipo más goleador, está anteúltimo en la tabla del Apertura, con la menor cantidad de goles convertidos, apenas 11.

Cappa aseveró que en Huracán vivió “la mejor etapa de su vida”, pues tuvo “un idilio con una hinchada” por primera vez en su carrera. “La relación con la gente es extraordinaria y me hice hincha por primera vez del equipo que dirigí. En el torneo anterior toda la gente empezó a creer de nuevo que el fútbol es alegría, es toque, es talento. Me quedo para siempre con eso. Cuando vine a Huracán, vino un técnico. Y ahora se va un ‘quemero’”, graficó.