Las palabras de Sir Alex Ferguson lo están acorralando. Seis meses atrás, el manager del Manchester United declaró que Carlos Tevez no valía los 25 millones de libras que el Manchester City había pagado por él. Ferguson dijo: “No creo que valga tanto. Era popular con los hinchas, que siempre tienen a sus héroes, y no tengo problemas en darles el gusto siempre que el trato lo valga, pero, simplemente, él no vale 25 millones”.

En este momento parece que cada centímetro de Tevez se parece al de un jugador de 25 millones, particularmente cuando se tiene en consideración que Ferguson gastó 30 millones en Dimitar Berbatov, un futbolista cuyo arribo a Old Trafford efectivamente sacó de la escena a Tevez y contribuyó a su controvertida salida del United a mitad del 2010.

Los tres goles de Tevez, el lunes contra el Blackburn, el mismo día en que recibió el premio al mejor futbolista de la Premier League durante diciembre, llevó al Manchester City al cuarto lugar de la tabla.

La comparación entre Tevez y Berbatov muestra que el argentino es el que está devolviendo con goles lo que se pagó por él. Ya anotó 15, once de ellos en los últimos nueve partidos, una cifra superior a la modesta contribución de Berbatov: seis en 23 partidos.

Nigel de Jong, compañero de Tevez en el City, es uno de los que cree que Ferguson debería tragarse sus palabras. “Es tarea del jugador mostrar lo que vale –opinó el holandés–. Alguna gente piensa distinto sobre Tevez, pero si lo ven jugar ahora tienen que cambiar sus puntos de vista. Me parece muy bien que él juegue ahora con nosotros. Hay un montón de buenos jugadores pero en este momento él es, quizás, el mejor goleador de la Premier League. Está en llamas.”

El martes, quizás, se acaben las palabras. Manchester City y Manchester United se medirán en la postergada semifinal (a causa del mal tiempo) de la Carling Cup. Ya se agotaron todas las localidades.

* De The Independent, de Gran Bretaña. Especial para Página/12