Brasil y Holanda protagonizarán hoy uno de los duelos principales de los cuartos de final del Mundial. Y en ese sentido, el técnico brasileño, Carlos Dunga, pronosticó ayer que ambos equipos jugarán “un partido entusiasmante”, a la altura de los vibrantes duelos desarrollados en Estados Unidos 1994 y Francia 1998, cuando era capitán de la selección. “Los encuentros entre Brasil y Holanda son siempre bellos”, dijo el entrenador, quien afirmó que ambos son equipos que “buscan jugar, tienen jugadores de alta calidad técnica y hacen lo que a todos les gusta: gambetean, corren riesgos, buscan el gol”.

“Cuando dos equipos juegan de esta manera, siempre hay un buen espectáculo”, expresó Dunga, quien en Francia 1998 fue el autor del gol que eliminó a Holanda de la lucha por el título en la definición por penales, en cuartos de final, después del empate en un gol en los 90 minutos y en el tiempo suplementario. Dunga era el capitán del seleccionado también en 1994, cuando Brasil obtuvo el “tetracampeonato” después de imponerse 3-2 en cuartos de final gracias a un gol de tiro libre del lateral Branco. “El penal de 1998 fue importante, porque necesitábamos confirmar el triunfo de 1994. Yo sentí la presión de convertir ese penal. Ese fue uno de mis últimos partidos con la selección brasileña. Lamentablemente no hemos logrado el título, pero haber llegado a dos finales mundialistas consecutivas y ganar una ya es algo importante”, expresó.

En la conferencia de prensa, Dunga no quiso confirmar el equipo titular que presentará hoy frente a Holanda y tampoco la táctica que aplicará para frenar al goleador Arjen Robben, a quien dedicó entusiasmados elogios: “Sin duda es un jugador diferenciado, técnico. En los últimos partidos del Bayern Munich fue decisivo, y un jugador decisivo hace la diferencia”. Sin embargo, el técnico aseveró que no pretende “inventar una táctica para cada partido”. “Tenemos una forma de posicionarnos sobre la cancha y tratamos de estudiar al adversario, para intentar bloquear los puntos fuertes y sacar provecho de los puntos en los que tenemos condiciones de superarlos.”

Según Dunga, a partir de ahora “se va estrechando el camino” del Mundial, y los partidos “serán cada vez más difíciles, más emocionantes y con más calidad técnica”. “Esperamos un partido abierto. Creo que a partir de ahora ya nadie podrá cuidarse demasiado: hay que jugar para ganar. Con los jugadores de calidad que tienen ambos equipos, la tendencia es que sea un partido bello”, resaltó.

Con relación al equipo de hoy, el volante Felipe Melo constituye la principal incógnita, ya que si bien entrenó ayer en Port Elizabeth, Dunga dijo que su presencia está en duda. “Felipe está bien, entrenó normalmente, está en condiciones”, aclaró el conductor. La posible ausencia de Melo no es la única preocupación, debido a que también sufrirá la ausencia del mediocampista Elano. Melo se recupera de una torcedura en un tobillo tras una dura falta sufrida durante el juego ante Portugal, y en su lugar entraría Josué.