DEPORTES › CON PEÑAROL DE MAR DEL PLATA Y BOCA, EN SANTA CRUZ
Será la 27ª edición de un torneo que le dio brillo y prestigio al deporte argentino. Habrá presencias mundialistas, regresos desde Europa y cambios en las reglas. Los marplatenses son candidatos, pero asoman Libertad, Quimsa y La Unión.
› Por Ariel Greco
Desde Río Gallegos
/La Liga Nacional de Básquetbol tendrá esta noche el estreno de su vigesimoséptima edición cuando el campeón vigente, Peñarol de Mar del Plata, se enfrente desde las 21 con Boca, que hará de local en el Boxing Club de Río Gallegos, en una medida promocional de la Asociación de Clubes (AdC). Se espera que el estadio luzca completo, ya que la entrada es gratuita por iniciativa del gobierno provincial, que solventa el acontecimiento. Para esta nueva edición del certamen más importante del básquetbol local habrá varios atractivos, tanto a nivel deportivo como reglamentario y de marketing.
Desde hace algunas temporadas, varios son los jugadores que regresan a la competencia luego de sus experiencias europeas. Para este año, los nombres más rutilantes que vuelven son los de Juan Gutiérrez (Obras), Matías Sandes (Boca), Roberto Gabini y Matías Lescano (Atenas) y los extranjeros Robert Battle, Joseph Bunn (Argentino de Junín) y Josh Pittman (Obras), entre otros. Con esos retornos se espera que la competencia recupere un poco más de nivel.
Del plantel que obtuvo el quinto lugar en el Mundial de Turquía, seis integrantes arrancarán la temporada de la Liga. En el campeón Peñarol seguirán Leonardo Gutiérrez y Marcos Mata, además del entrenador del equipo, Sergio Hernández, que aún aspira a continuar en la selección. En Regatas de Corrientes estará Federico Kammerichs, mientras que Román González continuará en Quimsa de Santiago del Estero. Los impactos los dio Obras, que contrató al base Luis Cequeira y repatrió a Juan Gutiérrez, además de sumar como técnico a Julio Lamas, que fue el entrenador argentino en el Mundial de 1998 y también es candidato para dirigir en el próximo ciclo.
La presencia de Mercedes Benz como sponsor de la Liga Nacional para esta temporada motivó una movida de promoción, copiada de la NBA. En todos los partidos televisados, tres espectadores, por sorteo, tendrán la chance de efectuar un lanzamiento desde la mitad de la cancha y, de convertirlo, se adjudicarán una Sprinter. La idea es utilizar ese concurso como método de promoción.
A diferencia de lo que ocurre en el fútbol, la FIBA siempre busca innovaciones reglamentarias para mejorar el espectáculo. La más importante para este año es el alejamiento de la línea de tres puntos, que pasó de estar a 6,25m a 6,75m. Otro cambio se da en el reloj de posesión, que no volverá a los 24 segundos luego de una infracción si el equipo atacante ya consumió más de 14. En ese caso, volverá con esa cifra, lo que le da menos tiempo a un equipo para armar su ofensiva. La otra modificación es la pintura en los tableros, que será como en la NBA, con un semicírculo bajo el aro donde los defensores no podrán ubicarse para intentar provocar una falta ofensiva.
El campeón Peñarol asoma como el gran candidato a repetir el título. Con siete jugadores de los diez que ganaron cuatro títulos de la temporada pasada (Liga Nacional, Super Ocho, Interligas y Liga de las Américas), el equipo de Hernández aparece armado con una base muy superior al resto y completó una especie de “Grand Slam” al adjudicarse el sábado pasado la Copa Argentina, el único torneo que se le escapó en la 2009/2010. “Es una alegría repetir semejante plantel”, aseguró el capitán y símbolo del club, Sebastián “Tato” Rodríguez. “Es el equipo del momento, el ejemplo a seguir”, remarcó Pablo D’Angelo, el entrenador de Boca. Para Hernández, la mayor virtud de sus jugadores es la capacidad de resolver situaciones límite. “A este equipo, por los tremendos competidores que tiene, que ya lo demostraron, le hace bien jugar bajo presión. Jugamos mejor de banca que de punto”, sostuvo el entrenador, que ya vivió la experiencia de abrir una Liga en Río Gallegos, aunque en la vereda de enfrente: dirigía a Boca en la 2004/2005 cuando se enfrentó con River.
Más allá del favoritismo de los marplatenses –que no tendrán clásico este año porque Quilmes descendió y jugará en el TNA–, hay un compacto lote de equipos que asoman con intenciones de destronarlos. Libertad, si no lo asuelan las lesiones –ya perdió a Andrés Pelussi por la rotura del tendón de Aquiles–; Quimsa, si logra química de equipo, porque nombres le sobran; La Unión de Formosa, si repite todo lo bueno que mostró en la Copa Argentina, donde finalizó segundo y venció por dos puntos al campeón; y Obras, con un plantel de jerarquía, son los potenciales rivales del campeón en el comienzo de una Liga que, con todas sus dificultades, ya suma 27 años de emoción.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux