El plantel profesional de Quilmes recibió ayer pedradas en el micro que los trasladaba desde La Plata hacia su estadio, donde comprobaron que también sus vehículos particulares habían sufrido daños, como rotura de vidrios y abolladuras en la carrocería.

El hecho se produjo momentos después de que Quilmes sufriera una nueva derrota ante Gimnasia, con lo cual se complica su permanencia en primera división. Quilmes está presidido por José Luis Meiszner, quien el jueves acompañó al titular de AFA Julio Grondona, para responder ante diputados nacionales sobre supuestos vínculos de los directivos del fútbol con los barras bravas, lo cual negó. El vice primero del club es el Jefe de Gabinete nacional, Aníbal Fernández, máxima autoridad de la seguridad federal.

El ómnibus que los transportaba tomó la bajada de la autopista Buenos Aires-La Plata y cuando llegó a Brandsen y Pringles, barras de Quilmes arremetieron a las pedradas contra el vehículo mientras lanzaban insultos por la mala campaña. La sorpresa fue mayor cuando el colectivo arribó al estadio Centenario, donde se encontraban sus autos particulares. La mayoría había recibido roturas de consideración. Entre los vehículos dañados se encuentran los de los defensores Ariel Broggi y Danilo Gerlo, y del colaborador del cuerpo técnico y ex jugador del club Adrián Czornomaz. El plantel completo se trasladó a la Comisaría 3ª de esa localidad para realizar la denuncia, pero llamativamente fue seguido por el grupo de los agresores quienes durante el trayecto hasta la dependencia policial fueron insultando al equipo.

Luego de realizada la denuncia el equipo se trasladó al estadio Centenario escoltado por la policía, para realizar las pericias y el acta, y retirar los vehículos. Los uniformados tuvieron que escoltar a los futbolistas en la salida del predio, según confió a DyN un jugador que pidió reserva de su nombre. Futbolistas Argentinos Agremiados informó que su secretario general, Sergio Marchi, acudió al lugar para evaluar los pasos a seguir.

En el plantel analizaban la posibilidad de no entrenar el lunes al tiempo que trascendió que el Coprosede podría decidir la inhabilitación del estadio quilmeño por estos hechos.