Los resultados positivos durante la pretemporada, con victorias ante Independiente y River (ambos 2-0), cambiaron el humor de Boca con respecto al año pasado. Así, los dirigidos por Julio Falcioni intentarán profundizar esa senda de triunfos en el torneo Clausura. Pero, en medio de ese panorama alentador, ayer el plantel de la Ribera recibió una mala noticia: el defensor Christian Cellay sufrió un desgarro en el isquiotibial derecho, por lo que no sólo no jugará el compromiso del sábado frente a San Lorenzo, en la definición de la Copa de Oro en Mar del Plata, sino que también se perdería el superclásico de Mendoza y el comienzo del campeonato.

El ex zaguero de Estudiantes se retiró del entrenamiento por una dolencia muscular, y posteriormente se comprobó la gravedad de la lesión. Los estudios determinaron que tendrá tres semanas de recuperación, por lo que su reemplazante para el partido ante San Lorenzo sería Fabián Monzón.

Cellay tenía un puesto asegurado en la defensa de Boca para jugar contra el elenco de Boedo, ya que el entrenador tenía previsto ubicarlo como marcador lateral derecho en reemplazo de José María Calvo, pero la lesión dio por la borda con esa opción. Imprevistamente se sumó a la lista de averiados que integran los mediocampistas Juan Román Riquelme y Sebastián Battaglia, quienes ayer trabajaron en el gimnasio.

La tranquilidad en el plantel boquense se modificó. Por eso, Falcioni improvisará con variantes para afrontar el encuentro del sábado. En la formación titular estarán Clemente Rodríguez, el mediocampista Damián Escudero y el delantero Lucas Viatri, mientras que al arco retornaría Cristian Lucchetti. Por el momento son cambios posibles que se permiten en torno de la pretemporada, pero las lesiones complican el panorama con miras al certamen oficial. Quedan poco más de dos semanas para que Boca inicie su camino en ese campeonato, y allí intentará repetir los resultados positivos que consiguió en los amistosos de enero.