Apuntalado por la buena labor de sus mediocampistas, Boca derrotó por 3-0 a San Lorenzo y, tras la victoria por 2-0 ante Independiente de la semana pasada, se adjudicó la Copa de Oro del torneo de verano que se disputó en Mar del Plata. El Burrito Rivero abrió la cuenta y unos minutos después amplió Colazo, habilitado por el ex San Lorenzo, y, en la segunda parte, con un tiro libre fenomenal, lo liquidó Mouche.

El arranque fue parejo. Ambos equipos parecían más preocupados por no dejar hacer al rival que por crear situaciones y se repetían los intentos por las franjas laterales. Pasaron diez minutos hasta que, a espaldas de Monzón, se escapó Menseguez y envió un centro al corazón del área donde Velázquez sacó un cabezazo, pese a la marca de Insaurralde, que obligó a Lucchetti a despejar. Un llamado de atención a la defensa de Boca.

Al equipo de Falcioni le costaba atacar. No aparecían Mouche ni Chávez, y Viatri debía tirarse unos metros atrás para buscar la pelota. Sin embargo, luego de una buena jugada personal de Rivero, que ganó en el medio y se soltó en ataque, Mouche recibió un mal despeje y encaró para el área, se frenó, esperó a que Rivero se le levantara y corriera hacia la puerta del área chica y ahí sacó el centro que el ex San Lorenzo conectó para el 1-0 que, por supuesto, eligió no festejar.

El gol de Boca fue la llave para que el partido se abriera. Y en el intercambio, los de Falcioni estaban mejor. Colazo estuvo cerca del segundo, pero Migliore se lo impidió, como evitó luego, otorgando un tiro de esquina, que Chávez anotara con un derechazo desde afuera del área.

La clave de lo que comenzó a ser el dominio boquense estaba en el mediocampo. Ahí Somoza y Rivero se imponían sobre Reynoso y Alvarado y les alcanzaba con buscar a Mouche o Chávez para que Boca complicara en ataque. San Lorenzo necesitaba más de Carmona y de Aureliano, al menos para disimular la ausencia de Romagnoli, ausente por lesión.

No terminaba de acomodarse San Lorenzo cuando Colazo, habilitado por Rivero, ganó en la carrera y, así como venía, sacó un zurdazo cruzado que no encontró respuesta en Migliore para el 2-0. Viatri estuvo cerca del tercero, con un cabezazo bombeado que se fue apenas por arriba.

Sobre el final de la primera etapa, el árbitro Pompei no vio un claro agarrón de Caruzzo sobre Menseguez en el área. San Lorenzo protestó aireadamente el penal no cobrado y terminó con diez, porque Aureliano Torres insultó al juez y terminó viendo una roja.

Boca terminó de liquidar el trámite en el arranque de la segunda parte, con un fenomenal tiro libre de Mouche, que colocó el zurdazo por arriba de la barrera y al ángulo.

San Lorenzo no le encontró la vuelta al partido. Los cambios no lo ayudaron ni siquiera cuando Boca sacó el pie del acelerador.