Desde Santa Fe

La Selección Argentina tendrá hoy enfrente a Colombia, el equipo más complicado de un grupo que “apriori” se le presentaba accesible. Pero los planes y eventualidades que podían pensarse para este encuentro cambiaron al menos para la Argentina luego del empate en el debut ante Bolivia, un resultado que no estaba en los planes. No hay cuentas que valgan, la Selección quedó prácticamente obligada a vencer si quiere depender de sí misma para acceder a los octavos de final en la primera posición del grupo. Con un triunfo, los colombianos se habrán clasificado a segunda fase.

Para alivio del equipo de Sergio Batista, Colombia no mostró gran cosa frente a la joven selección de Costa Rica, que para peor jugó buena parte del partido con un hombre menos por la expulsión de Randall Brenes y luego se cerró atrás y prácticamente resignó sus posiciones de ataque, conformándose apenas con un par de llegadas.

En ese contexto, el resultado exiguo del partido ante los costarricenses es un indicador de que el equipo colombiano todavía necesita ajustes. El más importante, sin dudas: los espacios que deja cuando se lanza al ataque y suben sus laterales, algo que los delanteros argentinos, más rápidos, podrían aprovechar favorablemente.

Lento en el armado del juego, el equipo colombiano acelera en los últimos metros con atacantes como Gustavo Ramos, autor del gol ante Costa Rica, quien acompaña a Radamel Falcao García, y que, como el ex River, es peligroso si se le dejan espacios dentro del área.

Otro de los que tiene llegada al gol y que generalmente prueba suerte con remates de media distancia es el volante Freddy Guarín, a quien algunos recordarán por su breve paso por Boca, club en el que jugó sólo dos partidos y se coronó campeón del Clausura 2006. Guarín se mueve por el sector derecho de la cancha y es un jugador filoso, otro de los referentes de las selecciones colombianas Sub-20, con un presente próspero en el Oporto, de Portugal, al igual que Falcao. Guarín se asocia con Dayro Moreno, otro delantero con llegada que juega retrasado, integrante del aquel Once Caldas que derrotó a Boca en la final de la Copa Libertadores 2004.

A pesar del claro dominio territorial frente a Costa Rica, el equipo de Gómez también pagó los nervios del debut. Abundó en imprecisiones y pérdidas de la pelota, más allá de que en ningún pasaje del partido vio comprometido su dominio. Tampoco le sobraron ideas para romper el orden táctico que le presentaron los dirigidos por Ricardo La Volpe. Una carta en la manga del entrenador, una variante ofensiva, puede ser el ingreso de Hugo Rodallega, potente centrodelantero del Wigan inglés, quien puede soprender desde afuera y también es un acompañante válido para Falcao. En ese caso, el que saldría es Moreno. La variante es el ingreso de Carlos Sánchez en el mediocampo en lugar de Gustavo Bolívar (ver aparte). Aunque habría que ver si Bolillo está dispuesto conservar su esquema táctico de 4-1-4-1, como le gusta jugar.

La defensa es sólida y experimentada, con el ex River Mario Yepes (Milan) y el ex Boca Luis Amaranto Perea (Atlético de Madrid) como centrales, y Juan Camilo Zuñiga, el lateral derecho compañero de Ezequiel Lavezzi en el Napoli y Pablo Armero, lateral izquierdo, del Udinese; ambos con buena proyección en ataque. El arquero, Luis Enrique Martínez, casi no tuvo trabajo ante los costarricenses y actualmente ataja en Once Caldas. Un dato curioso: en un amistoso frente a Polonia en 2006 cantó las hurras con un gol de arco a arco.

La victoria en el debut no los hará confiarse ante los argentinos. En la previa, varios jugadores colombianos reconocieron que este partido no tendrá nada que ver con el de Costa Rica, porque “será más intenso” y “más abierto”. El propio Falcao admitió que ambas selecciones tienen condiciones y jugadores para “brindar el mayor espectáculo del que se haya visto en la Copa”. Aunque luego restó en la apuesta al afirmar que “Colombia no estará desesperada por ganar como lo estará Argentina”, quizás un indicador de que Colombia saldrá a esperar, al menos los primeros minutos. También habló en la previa de “la desesperación de Argentina”, la otra variante ofensiva del equipo cafetero, el delantero de Racing, Teófilo Gutiérrez, quien avisó que el equipo de Batista se encontrará con “una Colombia bien parada”.