Después de la dura derrota por 4-1 ante Estudiantes, el viernes por la noche, el entrenador de San Lorenzo, Rubén Insua, aclaró que no renunciará a su cargo a pesar del mal comienzo del equipo en el torneo Clausura. “No pienso en renunciar porque me siento respaldado por la dirigencia”, expresó, con tranquilidad, el director técnico que a fines del año pasado consagró a su equipo en la Copa Sudamericana. Pese a aquella conquista, los hinchas de San Lorenzo, desilusionados por el presente del equipo, cuestionaron a Insua y reclamaron mayor entrega a los jugadores durante el desarrollo del encuentro en La Plata.
Entre tanto malestar, Insua no sólo tiene que enfrentar la desconfianza del público, sino también la de una gran parte de la Comisión Directiva, en la que sólo el vicepresidente primero, Rafael Savino, promotor de su llegada, lo respalda. En la última semana, tras la derrota con Boca, se mencionaron los nombres de Carlos Bilardo, Reinaldo Merlo y Oscar Ruggeri, en ese orden, como posibles aspirantes a reemplazarlo en el caso de que Insua renuncie o sea despedido. Otro que también se escuchó fue el de Osvaldo Sosa, actual conductor de Lanús.
El presidente de la entidad, Alberto Guil, destacó en las últimas horas que su intención es respetarle el contrato a Insua, que vence en junio próximo. Sin embargo, con la campaña que está desarrollando el equipo en este Clausura (tres empates y tres derrotas en seis partidos, apenas tres unidades, con 13 goles en contra y apenas 7 a favor) y sin otro torneo a la vista que jugar para ganar y recuperar prestigio, no es improbable que ese contrato no se renueve.