El ciclista francés Rémy Di Gregorio, del equipo Cofidis, que marchaba 35º en el Tour de Francia, fue detenido preventivamente por 48 horas, junto con otros dos hombres en la misma situación, en el marco de otro caso de presunto doping. La policía allanó por la mañana el hotel donde se alojaba el equipo, en la localidad de Bourg-en-Bresse, y tras el arresto por sospecha de comercio con sustancias prohibidas, el corredor fue trasladado a Marsella. “Una de las personas acusadas transportaba en su vehículo productos cuya naturaleza exacta queda por determinar”, precisó un fiscal.

Según L’Equipe, Di Gregorio cayó a través de una llamada telefónica con un potencial vendedor de sustancias prohibidas. En cuanto se conoció el arresto del corredor, el equipo Cofidis lo suspendió de manera inmediata. “Todavía hay un estado de estupor porque, a pesar de que sabemos que hay muchos ciclistas que se pierden en el mundo de la bicicleta, siempre duele escuchar algo así. Estoy enojado porque es un desastre para el corredor, el equipo y el patrocinador”, dijo el director del equipo Yvon Sanquer.

Bajo la presión de los organizadores, Cofidis dejó el Tour de manera voluntaria en 2007, cuando un corredor italiano, Cristian Moreni, dio positivo por eritropoyetina (EPO). El actual líder de la carrera, el británico Bradley Wiggins (Team Sky), formaba entonces parte del Cofidis. El Tour descansaba ayer en Macon; el único argentino de la competencia, Juan José Haedo, se ubica en la 144ª posición.

El “affaire” Di Gregorio podría ser el primer caso de doping del Tour desde que en 2010 el español Alberto Contador dio positivo por clembuterol. La detención del ciclista se produjo el mismo día en que tres colaboradores del ex ciclista Lance Armstrong, siete veces ganador de Tour de France, fueron suspendidos de por vida por la Agencia antidoping estadounidense (Usada), uno de ellos el italiano Michele Ferrari, preparador físico de Armstrong, acusados de cometer infracciones dentro de un sistema de doping organizado a nivel del equipo, el US Postal. Armstrong, que siempre negó haberse dopado, presentó una demanda judicial contra la Usada.