Antonio Roma, legendario ex arquero de Boca, falleció ayer a los 80 años en el Hospital Santojanni, víctima de un virus intrahospitalario que lo afectaba desde el mes pasado. Apodado Tano o Tarzán, Roma inició su carrera en Ferro en 1955 y cinco años más tarde fue transferido, junto a su amigo Silvio Marzolini, a Boca, donde atajó más de una década y obtuvo cinco títulos. Además, fue un referente de la Selección Argentina, con la que disputó 42 partidos, entre ellos todos los de los mundiales de 1962 y 1966.

Dueño de un físico portentoso, Roma está considerado entre los mejores arqueros argentinos de la historia y fue ídolo de Boca por sus actuaciones entre 1960 y 1972, cuando se retiró tras haber participado en 323 partidos con esa camiseta. En ese lapso obtuvo los títulos de 1962, 1963 y 1965, y los Nacionales 1969 y 1970, además de la Copa Argentina 1969. Igualmente, su jugada más emblemática se dio en 1962, cuando se adelantó más de un metro y le contuvo un penal al brasileño Delem en un superclásico que finalmente Boca le ganó 1-0 a River y que le allanó el camino al título una fecha más tarde.

Su última aparición pública se dio el 8 de diciembre pasado en la Bombonera, cuando se lo homenajeó, junto a sus compañeros, por los 50 años de aquel título de 1962, la tarde en que en el público boquense pidió por la salida de Julio Falcioni como entrenador.