El ex campeón mundial de los pesados Mike Tyson reveló en su autobiografía que cuando piensa “en todas las cosas horribles” que le hizo su ex promotor Don King todavía le dan “ganas de matarlo”. “A veces fantaseo con volarle la cabeza a alguien para ir a prisión por el resto de mi vida”, escribió. En el libro, Tyson cuenta que un día encontró a su primera esposa, Robin Givens, con el reconocido actor estadounidense Brad Pitt. “No me pegues, no me pegues. Sólo estábamos repasando un libreto”, le habría dicho Pitt al ex campeón mundial pesado. Incluso en la cárcel, Tyson tuvo bastante actividad sexual, primero gracias a visitantes, y después con una consejera de rehabilitación de drogas a la que Tyson le envió 10.000 dólares para arreglar el techo de su casa. “Tenía tantas relaciones sexuales que estaba demasiado cansado incluso para ir al gimnasio del lugar. Me quedaba todo el día en mi celda.”