El presidente del Atlético Madrid, Enrique Cerezo, aseguró que “no es el momento para Diego Simeone de entrenar a la Selección Argentina”, tras la clasificación del equipo a la final de la Champions League, luego de vencer el miércoles 3-1 al Chelsea en Londres, instancia en que el equipo también es único líder de la Liga española.

“No es el momento para el Cholo de entrenar a la Selección. Le queda mucho camino para recorrer en los clubes y en nuestro equipo, que hoy es el más importante de España y uno de los más importantes de Europa”, declaró el máximo dirigente, quien confirmó que el entrenador argentino tiene contrato con la institución “por cuatro años más”, y agregó: “Sé que él ama a su país, ama a la Argentina y que algún día dirigirá la Selección Nacional”. Cerezo calificó a Simeone, quien supo destacarse como jugador del club durante dos ciclos (1994-1997 y 2003-2005), de “tipo extraordinario, un profesional 100 ciento por ciento y amante de sus amigos”.

El Atlético Madrid caía 1-0 en Stanford Bridge, pero lo dio vuelta para vencer 3-1 y clasificarse finalista de la Copa de Europa por primera vez en 40 años. “Quiero agradecerles a las madres de estos jugadores porque los hicieron nacer con unos huevos así de grandes. Tuvimos que trabajar para encontrar el partido que queríamos, que fue en el segundo gol”, dijo Simeone tras la épica victoria. “No nos detenemos a pensar con el rival que nos vamos a encontrar, más allá de que es un rival que está acostumbrado a jugar este tipo de finales”, dijo con relación al Real Madrid, que también animará la final del 24 de mayo en Lisboa.

Mientras las críticas arrecian en Europa sobre los estilos opuestos de entender el fútbol de Josep Guardiola y José Mourinho, el prestigio como técnico de Diego Simeone florece gracias a la mezcla de practicidad y pasión de su trabajo en el Atlético Madrid. “Simeone le da una lección a Mourinho”, tituló el británico Daily Mail.

“Yo soy muy respetuoso con el fútbol en general y creo que hay diferentes maneras de ganar un partido. Cada uno elige en función del equipo y del lugar”, había dicho Simeone en la previa del duelo, cuando las críticas llovían sobre el estilo ultradefensivo del Chelsea. “El fútbol es muy cambiante y nadie tiene la verdad. Por consiguiente no me ato a ninguna forma y respeto cualquier situación que plantee el rival. Por eso es bonito este juego. Si todos jugáramos igual, sería aburrido”, afirmó Simeone, que podría vivir un mes de mayo extremadamente glorioso si su equipo gana, consecutivamente, la Liga y la Champions.