La estadía de Juan Mónaco en Madrid acabó de manera abrupta ayer cuando Rafael Nadal, el número uno del tenis mundial, lo barrió del Masters 1000 de la capital española con un triunfo contundente, 6-1, 6-0. Era el primer partido para el español en el polvo de ladrillo este año y las sensaciones fueron muy positivas, con un juego efectivo, por momentos brillante, con el que arrolló a un Mónaco lejos de sus mejores días.

“Del otro lado estaba Nadal”, subrayó Mónaco tras el encuentro. “Desde el principio sabía que éste era un partido duro, muy duro.” El tandilense acusó la inactividad además de sus continuas discusiones con el juez de silla. “Esos pequeños factores hacen que uno se desconcentre y que la montaña se vuelva cada vez mucho más alta”, analizó.

Mónaco indicó que necesita sumar partidos para ir encontrándose mejor sobre la cancha. “Venía de tres semanas sin jugar y había podido entrenarme muy pocos días antes de venir acá. La verdad es que esta vez las cosas no me salieron”, lamentó.

Se encontró con un Nadal en alza. “Todos especulaban con que no estaba con confianza, pero queda demostrado que está impecable, yo lo sentí de esa manera estando del otro lado.” Mónaco, que reapareció el martes con una victoria frente al austríaco Jürgen Melzer tras la lesión de hace un mes en el torneo de Houston, nunca pudo vencer a Nadal sobre la superficie naranja. “Me dieron una buena clase” afirmó con un dejo de admiración por su rival.

“Cuando me puse 4-1 en el primer set, sentí que estaba jugando mucho mejor (que en anteriores partidos) y estoy contento con cómo lo hice hoy (por ayer) sobre la cancha”, declaró el número uno. En los últimos torneos sobre polvo de ladrillo decepcionó con eliminaciones en cuartos de final en Montecarlo y Barcelona.

Nadal quedó como gran favorito a la victoria final por las bajas y derrotas de adversarios de peso. El serbio Novak Djokovic, segundo del ranking, renunció antes del inicio del torneo por lesión y el suizo Roger Federer para ser padre. El también suizo Stanislas Wawrinka, número tres de la ATP, se vio superado el martes por el austríaco Dominic Thiem 1-6, 6-2, 6-4.