Grecia venció ayer 2-1 a Costa de Marfil, con un penal en tiempo de descuento, y se clasificó para los octavos de final del Mundial, instancia en la que jugará ante Costa Rica. Los goles de Grecia los convirtieron Andreas Samaris y Georgis Samaras de penal, mientras que para Costa de Marfil había empatado Wilfried Bony. Grecia, con esta clasificación a la próxima ronda, produce para el fútbol de su país un hecho histórico, dado que participan por tercera vez en un Mundial (Estados Unidos 1994 y Sudáfrica 2010) y nunca habían accedido a la siguiente fase.

Cuando finalizaba el partido, ya en tiempo recuperado, el árbitro mexicano Marco Antonio Rodríguez sancionó un penal a favor de Grecia en una confusa falta que le cometieron al delantero Samaras, cuando estaba a punto de rematar dentro del área. El mismo Samaras se encargó de ejecutar la pena máxima y logró el tanto con un tiro fuerte y preciso al palo izquierdo del arquero Boubacar Barry, quien a pesar de que fue hacia la pelota nada pudo hacer para evitar el gol.

El triunfo griego, en definitiva, fue justo, en un partido que tuvo las mejores situaciones para convertir –estrelló dos pelotas en el travesaño y una en el palo– y también tuvo que superar en el primer tiempo las salidas por lesiones del arquero Orestis Karnezis y el mediocampista ofensivo Pankiotis Kone. A pesar de esa dificultad, Grecia se puso 1-0 precisamente por medio de Samaris, que había reemplazado a Kone 17 minutos antes.

El empate de los africanos por parte de Bony, otro reemplazante que se hizo presente en el marcador, llegó en un momento en que los europeos tenían prácticamente controlado el encuentro. Pero Grecia no sintió el efecto y siguió atacando hasta llegar a la instancia de ser favorecido por un penal dudoso. Esta situación de los penales no muy claros se viene dando seguido en la Copa del Mundo y todo empezó en el inicio de la competencia, cuando el local fue beneficiado con uno por un árbitro japonés.

A medida que fueron pasando las fechas de los grupos, muchos equipos tuvieron la oportunidad de tener un penal a favor, con infracciones que dejaron muchas incógnitas. En este caso, los griegos, más allá de que ayer intentaron mucho más que el rival alcanzar la victoria, lograron la clasificación a través de la pena máxima, y también con dudas sobre su legitimidad.

Estadio: Castelao (Fortaleza).

Arbitro: Marco Antonio Rodríguez (México).

Gol: 41m Samaris (G); 73m Bony (CM); 90m Samaras de penal (G).

Cambios: 12m Samaris por Kone, 24m Glykos por Karnezis (G), 61m Bony por Tioté (CM), 78m Diomandé por Drogba (CM) y Gekas por Karagounis (G), 83m Sio por Gervinoh (CM).