“Nos iremos moviendo en base a este esquema, el 4-3-3, pero podríamos variar si el rival nos presenta algún problema, pero siempre teniendo la tenencia de la pelota, la posesión del juego y sin perder el protagonismo.” A horas de iniciar hoy su ciclo como entrenador de la Selección Argentina en un amistoso ante Alemania, en Dü-sseldorf, donde el equipo teutón será recibido en cancha por su público por primera vez desde que ganara el Mundial de Brasil, Gerardo “Tata” Martino definió ayer la impronta que buscará imprimir en el plantel albiceleste en los próximos compromisos amistosos. Antes de dirigir su primera práctica con el plantel argentino, Martino confirmó que utilizará el esquema 4-3-3, aunque no descartó variar el dibujo cuando el rival lo requiera. “No sería definitivo respecto del esquema de juego. Pero ahora estamos en un proceso inicial y nos tenemos que hacer fuertes en ese esquema”, comentó ayer Martino en conferencia de prensa antes de analizar la disyuntiva que tuviera su antecesor Alejandro Sabella en cuanto al armado de un equipo ofensivo que mantenga el equilibrio defensivo.

“Cuando uno quiere jugar tan arriba y presionar, el desequilibrio tiene consecuencias fatales. Con el paso del tiempo veremos cómo poner a los mejores dentro del equipo, pero al mismo tiempo estar equilibrados para no tener consecuencias. Nos vamos a equivocar, seguro, y aprenderemos de los errores”, dijo Martino, y adelantó que “sería apresurado” pensar que la impronta que logró imprimir a Newell’s en 2012 se vea rápidamente en la Argentina, aunque dijo que su “expectativa es que a medida que vayan pasando las fechas encontremos un buen funcionamiento”.

Con un plantel con casi todos los jugadores que estuvieron en Brasil (que tuvo las recientes bajas de los lesionados Maximiliano Rodríguez y Ezequiel Garay, que fueron cubiertas por las convocatorias de Erik Lamela y Nicolás Gaitán) en el que sobresalen Angel Di María, Gonzalo Higuaín y Sergio Agüero, Martino comentó sobre la ausencia del lesionado Lionel Messi y al infundado rumor sobre una posible renuncia del capitán de la Selección a futuras convocatorias (ver aparte), que será “el primero de varios rumores que se van a suceder mientras esté en la Selección”.

Martino anunció ayer que una vez terminado el compromiso con Alemania, el cuerpo médico argentino viajará a Barcelona para supervisar el estado físico de Messi, así como también lo hará con Rodrigo Palacio, en Milán, y el arquero argentino de la Real Sociedad, Gerónimo Rulli, quien el último lunes fue operado por una fractura en su pie izquierdo. Al nombrar al ex arquero de Estudiantes, Martino deslizó la idea de una renovación de nombres que se irá dando durante las próximas convocatorias.

A sus 51 años, Martino es el primer técnico en la historia de la Selección Argentina con experiencia mundialista en otro combinado nacional, ya que dirigió a Paraguay en Sudáfrica 2010, hecho sobre el que comentó: “Está claro que ya hay un montón de cosas que no desconocemos. Aprendimos a convivir con muchas situaciones. Sabemos cómo movernos, hasta dónde exigir de un lado o hasta dónde del otro. Para mí son cosas mucho más naturales. Esto no quita que en cuatro años no vayamos a tener momentos de dificultad o tristeza, pero haber vivido una etapa como seleccionador te da una experiencia. Por lo menos, no nos manejamos en las tinieblas”, concluyó.