El defensor Germán Pezzella y el volante Ariel Rojas coincidieron ayer en que la serie de octavos de final de la Copa Libertadores contra Boca, que comenzará mañana en el estadio Monumental, no es comparable con el resto de los Superclásicos ni importan los antecedentes. “No tenemos que compararlo con la otra serie que jugamos por la Copa Sudamericana en 2014. En estos partidos tampoco cuentan demasiado las rachas que tiene cada uno”, señaló Pezzella en rueda de prensa.

Rojas, por su parte, consideró que “son dos partidos y el que se jugó el domingo no cuenta”, en referencia al encuentro por la undécima fecha del campeonato de Primera, en el que Boca se impuso 2-0 en la Bombonera y le sacó el invicto a River para quedar como único líder. “No hay que salir desesperado pero sí asumiendo protagonismo porque somos locales, es lo que hacemos siempre. Tenemos que usar el fervor de los hinchas para ser agresivos y hacer valer nuestra localía. Hay que saber jugar este tipo de partidos que duran 180 minutos”, sostuvo Rojas.

Para Pezzella, “los partidos de Copa son diferentes, porque se definen en 180 minutos. Se especula mucho con el gol de visitante, pero el jueves hay que tratar de aprovechar la localía, asumir el riesgo y buscar el partido en todo momento. Tenemos que aprovechar el entorno para poder ser un equipo corto y de presión alta”.

Rojas hizo algo de autocrítica respecto del partido del domingo, mientras que Pezzella explicó que “las críticas quedan para puertas adentro del vestuario”. El volante expresó: “Tenemos que tener más profundidad a la hora de atacar. Los dos (por Boca y River) nos respetamos demasiado y ninguno terminó siendo lo profundo que suele ser contra otros equipos. Todos queremos volver al nivel del semestre anterior, pero sabemos que es muy alto y es difícil repetirlo”.

Sobre el rival, Rojas opinó que “el juego va a pasar por lo que hagamos nosotros, más que de ellos. Pero intentaremos cortarles el circuito de juego y no dejarlos salir rápido”. “El ambiente de un Superclásico es distinto a cualquier otro partido, el margen de error es menor. A veces los planteos son distintos y todos tenemos predisposición para hacer lo que nos toque, aunque de local siempre buscamos el arco rival y ser protagonistas”, agregó Pezzella.

“Este equipo, más allá de los nombres, siempre priorizó atacar. La disposición táctica es determinante a la hora de definir si un equipo es o no defensivo. Tenemos jugadores inteligentes que ya demostraron que tienen condiciones y espíritu para salir adelante de situaciones adversas”, destacó Rojas.